Dulce deseo

19

Alex

Ya habían pasado tres días desde que estuve con mi pequeña y desde ese día noté como corazón se abrió completamente a mi.

Los findes de semana pactamos en dormir juntas intercalando casas y siempre dos dias a la semana quedar para ver una maratón de películas.

Hoy me tocaba ir a su casa. Me estaba preparando y sentí el timbre de mi casa. Me extrañó pero luego pensé en que mi pequeña vino a darme una sorpresa.

Abrí entusiasta y cuando observé quien era en verdad, el mundo se me cayó.

Elisa.

Ese nombre aún me producía escalofríos. Solo amé a una mujer más aparte de a mi pequeña y esa fue Elisa.

Había cambiado durante estos dos años. Estaba mas alta y tenía mucho mejor físico del que recordaba.

- ¿Qué haces aquí? - pregunté fríamente.

- Vengo a recuperarte. Hice mal pero yo te amo. - Intentó tocarme y yo me alejé de inmediato.

- No me toques, me das asco.

- Pero ángel, sé que aqui, sigo estando yo y por eso he venido. - Dijo señalando mi corazón.

- Tengo novia y si me disculpas iba a tener una cita con ella.

- ¿Novia? Imposible, según lo que me dijeron solo te acostabas y ya.

- Ella me cambió, ella hizo desaparecer al horrible ser en que tu me convertiste.

- Ay cariño, ella no se compara a mi, seguro que solo es algo para desquitarte de mi y olvidarme.

- No lo es, te estás equivocando.

Ella se acercó a mi y yo retrocedí. Sin darme cuenta un brazo pequeño la retuvo y en ese momento aprendí algo .

Nunca hagáis enfadar a Jud.

- No la toques. - su voz era fría y demandante y su mirada era la de una asesina. Ejercía fuerza y lo sé porque Elisa cerró los ojos.

- Ya veo... Tu eres la noviecita de Alexa, una cría como tu.

Tragué en seco. Ahora mismo Elisa estaba siendo asesinada por Judith unas quinientas veces.

- Sí, soy su novia y tu eres la ex que se fue de putas con un gilipollas machista de mierda y que ha vuelto para hacer lo único que sabe, tocar los cojones a la gente y llorarle porque no eres más que una inútil. Además si Alexa está conmigo será por algo y si no esta contigo háztelo mirar.

Bum. Las venas de Elisa se marcaron y mi pequeña estaba tranquila como si no acabara de destrozar el orgullo de Elisa.

- Serás una críaja de mierda.

Elisa se abalanzó para intentar golpear a mi pequeña y ahí reccioné. No quería que mi pequeña viviera mas situaciones peligrosas, ya ha pasado por mucho.

- Le tocas un solo pelo y no respondo.

Judith

- Le tocas un solo pelo y no respondo. - la voz de Alex era tan fría que incluso yo me estremecí.

Elisa dio unos pasos hacia atrás y se fue corriendo malhumorada.

- Perdóname cariño, le abrí porque pensaba que eras tu y...

Le besé. Me puse de puntillas y le di un tímido beso.

Lo oí todo y sabía de ella, me importaba mucho que confiese en mi.

- Alex, cálmate,tus preciosos ojos estan oscuros. - tomé su rostro entre mis manos y juntamos nuestras frentes. Ella cerró sus ojos y sentí como su cuerpo se destensaba.

Rodee mis brazos por su cintura y la junté aún más a mi.

- Gracias pequeña, te amo.

Sonreí y besé su frente. Sus ojos brillaban y eso era lo único que yo quería.

Quería que fuese feliz.

Holi Todo el apoyo dado a esta historia me ha echo pensar y creo que si acabaré esta historia hehe.

Me centraré más en esta y luego seguiré con la de "la princesa de la luna"

Besos a todos y todas 💙💙