□12□

2.9K 288 56
                                    

Clare entro a la habitación de su hija sintiendo un velo de calma expandido por toda la habitación

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Clare entro a la habitación de su hija sintiendo un velo de calma expandido por toda la habitación. Jasper estaba sentado en su escritorio con su laptop encendida.

La vampira se acercó con cuidado a la cama ubicándose en la orilla para ver el rostro dormido de su hija, su respiración pausada, su cabello disperso en su cara. Con una sonrisa movió los rizos despejando su rostro de estos, acomodó más arriba las mantas para resguardarla del frío. Aún con su sonrisa miró hacía Jasper, observando el contenido que tenía a su esposo concentrado.

Su sonrisa desapareció.

—¿Qué es eso?— preguntó poniéndose de pie para ir a su lado.

—Pasajes de avión, para tus padres y Adhara.

—¿Porqué?

Jasper cerró la ventana y volteó a ver a su esposa que lo miraba con seriedad, aún sentado colocó sus manos en las caderas de esta dando un ligero apretón a estas.

—Dentro de poco todos no habremos podido ir a cazar, la sed será parte de todos nosotros y el bebé de Bella estará próximo a nacer— suspiró bajando su dorada mirada—. Será peligrosos para Adhara estar aquí.

—¿Y planeas que ella y mis padres se vayan de viaje a Nevada durante todo ese tiempo?

—Es mejor que tenerla aquí con vampiros que prontamente serán inestables, sin contar un posible ataca de los lobos.

Clare se alejó de golpe del agarre de Jasper girando a ver a su hija durmiendo. Su mentón se sacudió, podía sentir una opresión en su pecho al ver el rostro de su hija. No quería separase de ella, no lo quería y no podía planteárselo bien. Si bien aceptaba otras cosas al saber su riesgo, con Adhara era distinto. Era su niña, su hija. Era de ella.

Jasper colocó sus manos en sus hombros, podía sentir lo que su esposa estaba experimentado en su interior y era muy parecido al de él. No que quería que su hija se fuera, pero contando los riesgos era mejor eso a que estuviera expuesta a salir lastimada.

—¿Por cuanto tiempo sería?— preguntó la vampira combatiendo con su lado que no quería dejar ir a Adhara, tratando de volver a usar su cabeza de forma calculadora.

—Dentro de una semana seria lo mejor para su partida, un viaje diez días

—Que extraño, son diez días y aún así se ve demasiado tiempo—. Su voz se rompió y lucho para contener lágrimas.

No solo estaba procesando en los estragos que dejaría la batalla, sino en las repercusiones que esta tendrían en todos lo que la rodeaban. Sus padres y su hija, ellos tenía que seguir ignorantes respetó al mundo sobrenatural.

Pero no quería que se fueran, eran medidas demasiado drásticas.

—No compres los boletos— volteó a ver a Jasper limpiando con rapidez una lágrima solitaria que había salido de su ojo derecho—. Le diremos a mis padres que tuvimos que ir a la corte de Seattle o algo así, pero que tuvimos que viajar de urgencia para hacer el papeleo y les pediremos si pueden cuidar de Adhara por dos semanas.

B R E A T H-Jasper HaleWhere stories live. Discover now