i. another runaway bride

529 56 43
                                    

✶ 🌃 ⋆。˚ ⁞ CAPÍTULO UNO ˚.*ೃ
otra novia fugitiva
━━━━━━━━━━━━━━━

DENTRO DE LOS PLANES que Christine tenía para ese día de otoño, desmayarse en plena calle después de huir de su boda no era una de ellos

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

DENTRO DE LOS PLANES que Christine tenía para ese día de otoño, desmayarse en plena calle después de huir de su boda no era una de ellos. Bueno, tal vez huir del altar si había estado dentro de la lista de "cosas que hacer el día de hoy", pero lo de desvanecerse de la nada no, eso no lo vio venir. Una parte de ella le echaba la culpa a la falta comida, ya que para caer en el ajustado vestido que traída puesto no había ingerido la cantidad de alimento que usualmente consumía pero, por otro lado, pudo haber sido la tremenda maratón que hizo para alejarse lo más posible de la iglesia y su (ahora) ex prometido. Aunque, pensándolo bien, la última opción tampoco podría ser certera, ya que siempre había destacado en deportes y en todas las carreras que había hecho durante sus 24 años de vida, jamás se había ido a negro.

De hecho, era la primera vez que se desmayaba en toda su vida.

Era extraño.

Ya estando más consciente, Christine llegó a la conclusión que habían sido los nervios post fuga los que le habían jugado una mala pasada pero, si se había desvanecido en plena calle, ¿Por qué no seguía tirada allí?

Aún con los ojos cerrados, la mujer se dio cuenta de algunos detalles que hasta hace unos segundos no había pasado por alto y lo primero era que estaba sentada. No estaba recostada en el suelo, no tenía su cara aplastada contra el pavimento, no sentía el caluroso cemento quemando su piel, no. Estaba sentada en lo que parecía ser una incómoda silla de madera, con las manos amarradas detrás del respaldo con una gruesa cuerda. No se encontraba en un lugar cálido, al contrario, parecía estar en una habitación húmeda y fría.

Si había descubierto todo eso con los párpados cerrados, no imaginaba lo que podía hacer cuando los abriera.

Su corazón se comenzó a acelerar, logrando que sus oídos fueran capaces de escucharlo con tal fuerza que dudaba que dicho órgano se encontrara en su pecho. Sus manos, de pronto sudorosas, intentaron moverse sin lograr a nada y sus pies, desprovistos de cualquier tipo de zapato, fueron conscientes del frío piso de cemento.

Fue ahí cuando Christine decidió abrir los ojos,

A pesar de sentir cada vez más miedo, la joven no pudo evitar sentir orgullo, ya que absolutamente todas sus deducciones fueron acertadas.

Se encontraba en algo que parecía un viejo estacionamiento, tal vez de alguna tienda abandonada o a punto de abrir, no podía estar segura de eso. Las luces que iluminaban el lugar parpadeaban, dándole un aspecto más tétrico a toda la situación, pero no dejaría que eso la distrajera, más que nada porque después de tantos minutos tratando de analizar el lugar, notó que había pasado por alto lo más importante: Había más sillas en el lugar, las cuales estaban completamente vacías. Para ser más precisos, seis sillas más, todas acomodadas en círculo. Eso no era lo más extraño, de hecho la formación le recordaba un poco las terapias grupales (no es que ella haya ido a algunas, claro que no), sino la peculiar máquina que había en el centro de esta. Era como un cajero automático, pero algo le decía que no servía precisamente para sacar dinero.

anti-hero ♡ doctor who ❜Where stories live. Discover now