Día de culpa

509 45 7
                                    

Felix golpeó con timidez la puerta del apartamento de Chan una vez más. Llevaba días insistiendo, pero él no abría a pesar de encontrarse en el interior. No esperaba mucho, al menos una conversación para explicarle que fue lo que sucedió ese día y su antiguo yo. No le contó nada de sí mismo, ni de donde viene. Solo un día apareció y Chan se mostró interesado en él. Se dejó llevar, porque ser arrastrado por alguien más para no sentirse tan solo era algo normal para él que aceptó sin reclamar las condiciones de su relación para continuar al lado del hombre que amaba. 

Chan le gustaba, era cierto, no iba a mentir, pero pensar que en algún momento lo amaría como amaba a Hyunjin era una locura. No quería usar a la gente en beneficio propio, así que no aceptaría nuevamente una relación porque no daría todo de sí. Lo que quedaba en su interior eran migajas de recuerdos tortuosos que disfrazaba por preciosos para su propio acomodo. 

Finalmente, Chan cedió, dejándose ver detrás de la puerta con un rostro indiferente. Ante el ardor de su mirada, Felix solo descendió los ojos y acarició su cabello al nivel de su nuca.

—¿Podemos hablar? —preguntó.

—¿Sobre como te acostabas con dos hombres? —devolvió Chan— mira, no perderé mi tiempo y no haré que pierdas el tuyo, no necesitas explicarme lo que pasó, o si eres alguien que le abre el culo a cualquiera, no me importa, Felix. 

—Eso no es así, no es... 

—¿Entonces que era? —Chan enarcó una ceja, esbozando una sonrisa ladina— ¿Si invito a un amigo lo harás con los dos? —cuestionó cogiéndolo del brazo para obligarlo a entrar a su apartamento. Hizo chocar la espalda del menor contra la pared y apoyó un brazo para encerrarlo contra su cuerpo. —¿Entraban los dos en ti al mismo tiempo? 

Félix se sintió acorralado, pequeño, disminuido por las acusaciones. Negó con su cabeza, asustado, agitado por el repentino cambio de personalidad de Chan. ¿Todo lo anterior fue una mentira? 

—No, no fue así, era... era una relación poliamoros-

La estruendosa risa de Chan resonó con furia entre las paredes de la habitación. 

—Vamos a terminar esto de una vez, Felix, ya no me interesas, pero ese culo tuyo tiene algo que es adictivo. 

Contra su voluntad, Felix fue lanzado sobre la cama de Chan y se vio rápidamente despojado de sus ropas entre gritos desesperados. 

Regresó a su apartamento arrastrando los pies, con la mirada perdida y los años doliéndole en el cuerpo. Cerró detrás, dejando sus zapatos en la entrada y se lanzó sobre la cama. SE su entrada escurrió el líquido de Chan. Suspiró, abrazando la almohada y cerró los ojos comenzando a llorar. 

—Hyunjin... —mencionó mientras sus dedos se enredaban en medio de la tela. 

Chan no estaba orgulloso. Lastimó de la manera más cruel a la persona que tanto quería, pero no quería que volviera a tocar su puerta otra vez. Aquello le enseñaría a que no debía intentar acercarse. Las puertas de Chan estaban cerradas para Felix. 

❝ Tres ❞  -  「hyunminlix」Where stories live. Discover now