❝ Tres ❞ - 「hyunminlix」

Encuentro

Felix se sentó a una distancia prudente de él, aunque no fue por decisión propia. Sus antiguos amigos lo arrastraron hasta su grupo para conversar. Felix, al contrario de Hyunjin, no asistía a esas reuniones. Él no era un graduado, así que no técnicamente, no debía estar ahí, pero el cariño continuaba intacto y él se sentía, al fin, cómodo. 

Después de lo sucedido con Chan, se mudó una vez más. Al mes, Chan lo llamó insistentemente, pero Felix no contestó ninguna de sus llamadas. Un día le llegó un mensaje de él diciendo "Lo siento". Lo eliminó. 

Entró a un tratamiento psicológico y tras años de lo ocurrido, ya se sentía el mismo para compartir con los demás. Ingresó a estudiar un curso rápido de cocina y se volvió ayudante de chef en un restaurante. Ganaba bien, lo que le daba un buen pasar. 

No volvió a tener pareja después de Chan. Se preocupó de sanar, porque las heridas de su cuerpo sanaron pero no las de su alma, así que se conservó en solitario. 

Hyunjin, de vez en cuando, miraba a Felix. Sus ojos se iban hacia él como un imán. Seguía siendo precioso, sin duda. Su rostro se veía más maduro, pero sus ojos continuaban siendo los de un niño precioso y perfecto. Y Felix también miraba a ratitos a Hyunjin. Ese hombre se volvió mucho más sexy con los años. 

Hyunjin salió del lugar a fumar un cigarrillo cuando vio a Felix sentado con los ojos cerrados y el rostro elevado hacia la luna llena. Sus pecas brillaban... y sus labios con forma de corazón también. Pensó que quizás debía entrar y darle su espacio, pero Felix elevó los0 párpados antes de que él pudiese marchar. Ambos se miraron en silencio, uno no incómodo. 

—¿Quieres sentarte? —invitó el menor, palmeando el asiento que se encontraba a su lado. 

Hyunjin sonrió y se ubicó allí. —¿Qué haces? 

—Tomo un baño de luna —contestó el pecoso sin más, provocando una pequeña risita en el mayor. Elevó la comisura de sus labios y se acomodó con las manos en el borde del asiento. —¿Te ha ido bien? 

Hyunjin remojó sus labios y asintió— sí, me ha ido bien ¿Y a ti? 

Felix repitió la afirmación, sin decir nada más.  Hubo un silencio por parte de ambos, uno que Hyunjin no supo interpretar, pensando que quizás estaba incomodando. 

—Sé que es tarde, Hyunjin —inició el pecoso— pero no estaba listo para una relación poliamorosa, me gustaba mucho nuestra relación de dos, lo intenté, lo intenté pero no funcionó. Pensé que si me quedaba a tu lado, volverías a amarme, pero solo me lastimé a mi mismo con ese pensamiento egoísta. Ninguno de los dos, de los tres en realidad, merecía estar dentro de una relación basada en la deshonestidad. Debí decirlo en su momento, pero dependía mucho de ti y no quería perderte. Lo siento, Hyunjin, lo siento por irme así, por no conversar contigo lo que estaba sintiendo en ese momento, por no entenderte, ni intentarlo... lo siento por nunca decirle a mi mamá que éramos pareja... ella no entendió por qué no volvimos a ser amigos hasta que se lo dije... un poco tarde pero lo hice —pausó unos segundos— quizás no necesitas mis disculpas y estás disgustado conmigo, o quizás ya no te provocada, pero necesitaba pedirte perdón. —sus ojos se posaron en los de Hyunjin. 

Hyunjin tragó pesado, pensando en una manera de responderle. Al parecer, él también necesitaba un baño de luna porque elevó sus ojos hacia el satélite natural que iluminaba la tierra por las noches. —Pensé que ambos estábamos de acuerdo, pero no recuerdo haberte preguntado si querías eso o no. Debí hacerlo, Felix, debí considerarte en muchas decisiones que tomé solo pensando que por el simple hecho de estar conmigo las aceptarías, te herí, herí a Seungmin... mi peor error fue pensar que te tenía tan seguro que podía hacer cualquier cosa contigo... y me diste una cucharada de mi propia medicina cuando te fuiste de esa manera. Felix, lo siento tanto —negó con su cabeza, perdido en sus recuerdos— lo siento tanto por no estar ahí cuando necesitabas seguridad y afecto —su mirar volvió al pecoso. Lo conocía, y estaba intentando contener las lágrimas formando una sonrisa temblorosa en sus labios. 

La falta de palabras reinó unos instantes la conversación. Felix la quebranto con un suspiro—  espero que en tu próxima relación puedas ser realmente feliz, Hyunjin, te deseo lo mejor. No sé si eres alguien nuevo ahora pero... el Hyunjin que conozco es increíble y merece ser feliz —se incorporó de su asiento, estirando sus brazos para tratar de verse casual y no afectado por la plática— ¿Entremos?