Despertar

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Hinata despertó, otra ves, ella no sabía cuántas veces había hecho esto hasta ahora. Se encontraba en su casa, la luz de medio día entraba por la ventana, vio a su esposo dormido en un sillón a su lado.

Naruto kun... — pensó.

La puerta se abre de repente, entrando Himawari como una bala hacia los brazos de su madre.

¡Mamá! Estas bien. — gritó con alegría mientras lloraba.

Hima... — dijo en un susurro.

¡Mamá!. — se escuchó la voz de Boruto.

El adolescente entró por la puerta seguido por Kawaki. Ambos llegaron al lado de su madre.

Al fin despiertas. — dijo el rubio.

Naruto abrió los ojos ante los sonidos que le llegaban. Al despertar vio a su familia reunida en su habitación junto con su esposa que al fin despertó.

Hinata Chan. — dijo el Uzumaki poniéndose de pie.

Hinata se sorprendió por el sufijo que le dio Naruto. Pero no tuvo tiempo para pensar porque este le besó. Al separarse Hinata estaba pasmada.

¿Estabas bien?. — preguntó el Hokage.

Mamá. — preguntaron sus hijos en intervalos de tiempos distintos.

¿Que pasó?. — preguntó ella.

Todos los presentes quedaron mudos, después Naruto hablo.

¿No lo recuerdas?. — Hinata negó con la cabeza. — Estábamos en el día de campo cuando te desmallaste. Sasuke te metió en el Tsukuyomi infinito.

¿Que?. — dijo. — ¿porque?

Al parecer por envidia. — expresó con odio Kawaki. — Tenía envidia de ti por haber superado a su clan.

Lo peor es que Sakura y Sarada fueron sus cómplices. — dijo Himawari.

Esto sorprendió a Hinata. ¿Tal ves eso explicaba el sueño que había tenido?.

¿Que hicieron?. — preguntó.

Los capturamos. — dijo Boruto. — Pero Sasuke y Sarada escaparon dejando a Sakura atrás, ella fue ejecutada. Por cierto, ahora estoy saliendo con Sumiré.

Ellos tienen prohibido volver a la aldea ttebayo. — dijo Naruto viendo a su esposa. — Por cierto, Oba Chan quiere entrenarte para que te puedas defender, quiere que tu tengas las técnicas Senju, así que felicidades. — dijo Naruto con una sonrisa.

Hinata tenía una mirada perdida, ella no sabía que pensar o como sentirse. Esta mirada no pasó desapercibida para los demás.

¿Hinata Chan?. — preguntó Naruto.

No entiendo, lo que soñé en el Tsukuyomi... — comenzó a decir.

Oye. — dijo Naruto agarrándola de la barbilla mientras el sonreía. — No importa lo que hayas visto, esa no es la realidad. Sabes que te amo desde siempre y eso es lo que importa.

Acto seguido la beso. Hinata dejó su confusión y sonrió. Deba igual todo, tenía a su familia, pero más importante a Naruto. Ella sabía que solo serían felices ves juntos, sin nadie más.
































































REALIDAD.

Hinata estaba conectada a muchos aparatos médicos. Estaba postrada en su cama, inconsciente, devuelta a su fantasía del Tsukuyomi infinito, incapaz de ver la realidad.

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