Mʏ ғɪʀsᴛ ʟᴏᴠᴇ | ᴮʳⁱᵃⁿ ᴼ'ᶜᵒⁿⁿᵉʳ

ᴘʀᴏᴛᴇɢᴇʀʟᴀ

Nᴀʀʀᴀᴅᴏʀ |

Las manos de brian, se envolvieron alrededor de su cuerpo. Alejándola del peligro, que se había generado dentro de esa habitación, porque todo había pasado muy rápido como para que la pelinegra entrndiera lo que estaba sucediendo.

Habían localizado a dominic en varias zonas importantes de distintos países, hasta que al final, se localizo su ubicación en el edificio donde ellos estaban y de repente todo explotó.

Su cuerpo golpeó el piso. Su cabeza dolía demasiado y su vista estaba borrosa. Al instante lo reconoció, eran granadas de conmoción de última generación, estás servían para alterar los sentidos por un tiempo extenso.

Intento buscar a deckard, pero su cuerpo parecía inmóvil y su vista estaba fema borrosa en ese momento.

Esperaba que su amigo estuviera bien.

Su mente se lleno de recuerdos. Recuerdos dolorosos de Brasil y comenzó a sentir como le faltaba el aire, poco a poco, hasta que todo a su alrededor se volvió negro.

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-Vannia, vannia..-Repitió el nombre de la joven, teniendola entre sus brazos. Todos se acercaron lentamente hasta donde ellos estaban, aún todos seguían aturdidos por lo que sucedió.

-¿Qué le sucedió?-Pregunto hobbs poniéndose de cuclillas cerca de la pelinegra. Aun respiraba, de forma muy lenta y suave, pero lo hacia.

-No lo se.-Contesto brian. Estaba preocupado y la mirada asesina de Mia no lo dejaba tranquilo.

Sabía porque ella lo estaba mirando de esa forma y la entendía, pero en ese momento le parecía más importante el bienestar de havanna, ya luego resolvería lo demás.

-Ocúpate de tu novia, O'conner.-Le Advirtió deckard, sacándolo de ahí, tomando su lugar.-Que a vannia, la protejo yo.

-No seas infantil, deckard.-Pidió con frustración antes de alejarse de esa zona.

-Denle espacio. Ella estará bien.-Les dijo hobbs, al resto del equipo.

Y eso hicieron, todos se alejaron un poco, dándole espacio y luego de alrededor de una hora, despertó. Estaba confundida y asustada.

Se abrazo a deckard con todas sus fuerzas. Esos recuerdos se habían sentido tan reales, que juraba haber revivido por un momento esa pesadilla, una vez más en su vida.

Deseaba que llegara el día en que eso ya no la persiguiera.. pero no lo veía como algo posible, eso estaría siempre con ella.

Brian, la observaba de lejos deseando poder ser él quien estuviera cuidándola en ese momento.

-¿Tienes algo que contarme?-Pregunto Mia. Apoyándose junto a él, ambos miraban al dúo de amigos.-O algo que decírme, soy todo oídos.

Él negó. -No, no tengo nada para decirte, Mia. No comiences a hacerte la cabeza porque no es el momento.

-Bien.-Contesto con seriedad, yéndose del lugar, por obvias razones.

En el momento que deckard se alejo, se acercó él. Quería asegurarse que todo estuviera bien con ella.

-Hola, ¿Como te sientes?-Dijo y se sentó a su lado.

Ella le sonrió débilmente.-Estoy bien, no te preocupes. Gracias por haberte puesto en el medio de esa granada y yo.

-Aunque ya no seamos un equipo, siempre te voy a cuidar la espalda, vannia. Fue una promesa.

-Gracias, O'conner.

Le hubiera gustado tanto tenerlo con ella en brasil, porque todo hubiera estado un poco mejor. Sonrió ligeramente con cansancio y tristeza, antes de levantarse para irse a donde estaba deckard.