A Emma le gustaba Lucia

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Todo el dia no las pasamos con mi madre y Riv, al día siguiente salimos por la tarde de regreso a California así que aprovechamos cada momento que nos queda.

Mi padre me contacta en la noche para salir a cenar con el.

-suban suban-dice mi padre al bajar el cristal de su camioneta.

Miro a Emma quien al igual que yo pensó que lo veríamos en el restaurante y asiente para que no lo dejemos esperar más.

Abro la puerta del copiloto y le pido a Emma que sea quien se suba ahí, no hay manera de que deje que Emma viaje en el asiento trasero.

-disculpa que no te dijera antes, me era imposible salir del trabajo más temprano.

-está bien, no hay problema-mi padre me mira desde el retrovisor y me sonrie.

-y como van las cosas en el trabajo Emma?

-bien señor gracias...

-cuando es tu viaje?

lo mira confundida.

-tu investigación-aclara.

-ah, es a finales de noviembre-el tono de voz que Emma usa es el mismo que acostumbra a usar con gente desconocida, tratando de ser cordial más no familiar.

Esta más que claro que Emma aún tiene reservas con mi padre después de todo lo que le he contado.

-y como van los preparativos?

-bien, es difícil ponerse de acuerdo cuando es un equipo de 20 científicos y de lo mejor en su campo, pero vamos bien.

-de lo mejor en su campo...eso te convierte a ti en la mejor en tu campo?

Emma ríe incomoda-no consideró estar a su nivel, pero estoy tratando.

-estoy seguro que si, ya verás-la mira rápido para sonreírle y Emma agradece.

Papá estaciona en el aparcamiento de un restaurante lujoso, lo bueno es que predije que nos traería a un lugar como este y me arregle para la ocasión.

-veamos-posa los codos en la mesa-se que no he estado tan presente en tu vida hija y que la impresión que tienes de mi emma, no es la mejor, han tenido que pasar varias cosas para darme cuenta de eso y espero que no sea tarde para enmendar mis errores.

-cosas? Que cosas?-pregunto extrañada.

-empezando por que mi ex me mintió y el hijo que espera no es mío-sonrie ironicamente.

Emma me mira tratando de esconder la sorpresa del momento, ahora entiendo por que su pareja no nos acompañó la otra noche.

-per-

-no vinimos a hablar de eso, luego te contaré.

Llama a un mesero que pasaba y este se acerca.

-un whisky en las rocas, el mejor que tengas-dice y voltea hacia nosotras para invitarnos a ordenar.

-coca sin azúcar-digo y miró a Emma para que ordene.

-un martini.

El mesero asiente y se retira.

-solo puedo decir que eso me hizo darme cuenta que no estaba preparado para ser padre si con mi hija no lo he hecho bien.

Arqueo las cejas viendo hacia el suelo, en realidad no es una plática que me gustaría tener en este momento y Emma lo nota. Toma de mi mano y le da un apretón.

Mi padre se percata del momento incómodo que ha creado y trata de aliviar la tensión.

-es por eso que quiero que sepan que aquí estoy, Lucía-me mira exigiendo mi atención-aqui estoy.