XVI

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Liese.

"Nos vamos mañana, al atardecer"

Esas palabras no dejan de sonar en mi cabeza. Hace una media hora que Kay me contó el bombazo y me dio un beso cálido en la frente. ¿Habrá sido a modo de despedida? El simple hecho de pensar que no voy a volver a verlo me crea un nudo en el estómago.

Cuando Kay me dijo que quería fugarse pensé que iba a quedar en una mera fantasía propia de unos chicos como él y su amigo, pero me equivoqué, al parecer la decisión ya está tomada.

-¿Estás bien?- me pregunta Saskia, su voz está ronca. Yo me encuentro acostada mirando al techo, el uniforme todavía puesto. La miro algo sorprendida.

-¿No estabas dormida?- le pregunto, comenzando a sentir miedo por si ella ha escuchado la conversación con Kay a través de la puerta.

-Sí, pero no sé, he sentido ese sentimiento de que alguien a tu lado está mirándote. Además, la luz de tu mesilla está encendida- yo asiento- ¿Qué ocurre?

-Nada...Demasiado café. – trato de fingir una sonrisa despreocupada, pero juraría que mas bien se ha quedado en una mueca extraña.

-Claro...- ella me devuelve la sonrisa. Sus ojos están entrecerrados y su cara hinchada por el sueño. – Intenta descansar, mañana será un día duro. – Abro los ojos, incrédula, intentando descifrar si la sonrisa de Saskia oculta cinismo o solo son mis paranoias.

- ¿Por qué has dicho eso? – ella arruga el ceño ante mi tono.

- Tenemos examen de historia...- sigo observándola en silencio- ¿Para el que llevas estudiando toda esta semana?- entrecierra los ojos y ladea la cabeza, como si estuviera esperando a que yo reaccione. 

- Ah, sí, sí, el examen.

-Madre mía, que rara eres.

Dicho eso, ella se da la vuelta para seguir durmiendo y yo, después de mirar su espalda unos segundos más, apago la luz de la mesilla y me acomodo dispuesta a dormir. En ese momento, Franziska entra a la habitación y sus amigas la ayudan a llegar hasta su cama. Antes de irse me dirigen una mirada de odio, pero no le doy mayor importancia, simplemente cierro los ojos e intento descansar.

***

KAY

17.00pm.

El examen de Historia da comienzo tras el "Buena suerte" del profesor, y el silencio inunda la sala. Observo a algunos escribir con rapidez y a otros pocos mirar al techo en busca de inspiración divina.

Yo no hago ninguna de las dos cosas, simplemente escribo cosas que se me vengan a la cabeza y que recuerde de lo que he escuchado en las pocas clases a las que he asistido mientras hago tiempo hasta las 17.45pm; la hora en la que por fin empezaría el plan de escape, el cual Derek ha decidido apodar como "Fuga mortal".

Derek, el cual está sentado a mi lado, me mira y asiente, como asegurándome que todo está bien y todo sigue en pie. Los gemelos pelirrojos, que están sentados un poco más delante, mueven los pies, inquietos, y tienen la mirada fija en el examen, pero no escriben nada, lo cual es preocupante porque habíamos quedado en que deberíamos de escribir para no levantar sospechas. La novia de Derek, Anne, está escribiendo a una velocidad indecente. ¿Para qué estudiar si nos vamos a ir?

Hago una mueca de indiferencia y sigo paseando la mirada por la sala. Saskia, las amigas de Franziska, Franziska, y por último, la guinda del pastel, la joyita de la corona...Liese. En primera fila, al ladito del profesor, ¿Cómo no? Su mano va tan rápido que asusta. No la soporto.

PecadoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora