Capítulo 22

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- ¡Maldita sea! - exclamó a los gritos sofocado exactamente el mismo hombre que habia hecho la revisión de su cuarto aquella noche que casi tuvo relaciones con su ex roomie. - De nuevo, lo hiciste de nuevo. - soltó el hombre entrando a la habitación para encontrar a la peliverde noqueada en su cama, a pesar de que la luz del sol le daba en el rostro ella parecía no reaccionar a eso. -

Era mediodía, ya que la chica había faltado a clases el día anterior y hoy tampoco lo había hecho se le informó al encargado de su edificio y también de su piso que fuera a chequear si la estudiante seguía en las instalaciones de la escuela o si algo lo inhabilitaba a asistir a sus clases por un tiempo.

En estos casos se descarta que el estudiante en cuestión este en la zona médica por que de estarlo siempre se le informa a sus maestros si están siendo atendidos por alguna lesión o enfermedad.

Tratándose de que al momento en que informaron que era Demencia la que no había asistido a sus clases, fue una señal de alerta por su (ab)uso de somníferos.

Chequeo sus signos vitales y parecía respirar aún, lo hacia tan en bajo que por poco al verla creías que estaba muerta.

Pero, no.

El hombre intento despertarla, cosa que no iba a lograr, habia tomado pastillas de más, no despertaría ni aunque hubiera un terremoto, su cuerpo no saldría del efecto de la droga por un buen lapso de tiempo.

Tomo a la chica inconsciente en sus brazos para llevarla a la zona médica y cuando tuviera la oportunidad mandaría a alguien a revisar todo lo que ella tenia en su habitación, tenían que saber que pastillas uso o si fueron gotas para dormir.

Abrio el ascensor con dificultad y entro, si bien podia llamar para que vinieran por ella prefirió él llevarla para hacer más rápido todo, la primera vez que pasó esto no fue tan rápido el traslado de la chica.

El ascensor se detuvo para abrirse así que él hombre con la peliverde en brazos atravesó el lobby como un perro tras una ardilla, salió del edificio corriendo a la zona médica pensando una y otra vez que él le había dicho a ella que no queria volver a encontrarla en esta misma situación.

No es como que él estuviera sentimentalmente preocupado o al menos, no lo suficiente para decir que él quería a la chica de manera amistosa como tal pero, su trabajo requería exactamente esto, Demencia no era la única en la escuela con problemas como estos y por eso mismo existian varios protocolos anti drogas en la escuela pero, en un lugar tan grande donde jóvenes están por su cuenta en un espacio donde al terminar sus clases son libres de cualquier tipo de supervision es normal que ellos hagan cosas que no deban.

Él junto con otros empleados debían evitar que hubieran drogas en las habitaciones de los estudiantes, en sus casilleros o en cualquier otra zona de los edificios pertenecientes a la entidad de educación malvada.

Aun así esto de sobredosis era algo que se daba en las instalaciones.

- Es sobredosis, - anunció él entrando con la respiración agitada por lo que tuvo que correr para llegar ahí con la joven en brazos. - no despierta ni reacciona a estímulos externos. - informo a lo que los enfermeros y ayudantes médicos reaccionaron para buscar una camilla. -

- ¿Tiene idea de cuanto lleva así? - preguntó acercándose a él y a la chica una doctora con un pequeño foco para abrir un ojo de ella y alumbrar directamente a él para ver si habia una reacción. -

- Al menos unas nueve o diez horas. - supuso, no podia contestar con seguridad esa pregunta. -

- Por poco no reacciona. - soltó ella dejando que el ojo negro de la chica cerrará y ella apagar el foco. - Fentanilo, barbitúricos, heroina, cocaina... - ella iba a seguir nombrando distintas drogas hasta que él la interrumpió. -

°Amantes de Medianoche° DemenflugWhere stories live. Discover now