Capítulo 43

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- Gracias doctor. - dijo Nueng, despidiéndose de la mujer que les había hablado. Cuando se fue, se volvió para ver a su hermana. - Sam, ¿estás bien?

Sam no estaba bien, pero no era capaz de decirlo. La morena todavía estaba en estado de shock. A pesar de que había pasado casi una hora desde que su abuela se había desmayado frente a ella, no había sido capaz de procesar lo que había sucedido. Durante un segundo, en un momento de fuerza y ​​determinación para luchar por su relación, le había dicho a su abuela que estaba enamorada de una chica. Al siguiente, la mujer estaba en el suelo inconsciente. Justo en frente de ella. No sabía muy bien cómo había terminado en el hospital, pero sabía que su hermana estaba a su lado y Kirk y su padre estaban hablando en algún lugar distinto.

Sam había podido escuchar que su abuela estaba en observación debido a su edad, pero estaría bien. Sin embargo, ella estaba realmente asustada en ese momento. En el momento en que su abuela perdió el conocimiento frente a ella, se sintió como si tuviera diez años otra vez. Estar en el hospital le trajo los peores recuerdos de sus padres. Esperando escuchar alguna noticia. Si estaban bien o no. Si las cirugías habían sido un éxito o no. Y, al final, el momento en el que los médicos les dijeron que los habían perdido a ambos. Recordaba todo como si fuera ayer. Sam estaba teniendo las mismas emociones en ese momento. El miedo de perder a alguien tan importante para ella. Un miembro de la familia que la había criado desde que era una niña.

Obviamente, la mujer no era una abuela perfecta. Había mantenido a Sam para sí misma, tratando de convertirla en la princesa que no era durante mucho tiempo. Había criticado sus amistades y su deseo de ser alguien por sí misma y no la esposa de otra persona. Había tratado de convertirla en la heredera que su madre no había sido. Y Sam lo sabía muy bien. Debería haberla odiado más que a nada en el mundo, como lo hacía su hermana. Pero ella no podía hacerlo tanto. Una parte de ella siempre estaría agradecida con esa mujer por cuidarlas después del accidente automovilístico. Por darles un hogar y una educación. Por ser la figura materna que habían perdido. Por cuidarlas, de alguna manera. Y no podía pensar en un mundo donde esa mujer no fuera parte de él. Aunque era mayor, Sam nunca lo había imaginado y ver la posibilidad a la vuelta de la esquina la asustó.

- Sam.

Esa voz fue la única que pudo hacerla volver a la realidad. Levantó la cabeza y miró a su izquierda. Vio a Mon ir hacia ella, junto con el resto de su grupo de amigas. Se puso de pie y caminó unos pasos antes de que Mon la sostuviera en sus brazos. Sam la abrazó, buscando algo de consuelo. Una parte de su cerebro le dijo que Mon estando allí no era la mejor idea, pero necesitaba a su novia en este momento.

- ¿Cómo estás? - preguntó Mon, cerca de su oído. Se encontraba tocando el cabello de su novia, tratando de calmarla.

- No lo sé. Creo que estoy en shock. Y también tengo un poco de miedo. - Sam habló como una niña pequeña que estaba confundida acerca de cómo expresarse.

Mon se separó un poco para poder mirarla.

- Estoy segura de que va a estar bien. No te preocupes por ello.

- Ella estará bien. - agregó Nueng, en un tono un poco molesto. - El médico dijo que está bien. Me dijo que no mostraba ningún signo de enfermedad. Ella está perfectamente bien. Estoy segura de que fingió el desmayo.

La atención de todas las chicas pasó de Sam a Nueng con una mirada de sorpresa. Sam fue la única que no la miró, pero escuchó la conversación.

- ¿De qué estás hablando? - preguntó Jim. - ¿Se puede fingir un desmayo?

- Creo que mi abuela sería capaz de hacerlo. - respondió Nueng, convencida de sus palabras. - Ella sabe exactamente cómo controlar a mi hermana y estoy segura de que lo hizo para asustarla como lo está ahora.

The one - GAP: Pink Theory (ES ver.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora