En mi mundo (Bridgerton) ✔️

Capitulo 2

El baile de apertura en la casa Danbury es sin duda una de las invitaciones más esperadas, donde cada encantadora debutante irá para ser presentada.
Con título, castas e inocentes para esto han sido criadas y entrenadas desde el día en que nacieron.

Revista de Sociedad Lady Whistledown

Penélope lucia un vestido amarillo como era de costumbre, su madre se había empeñado en ponerle colores vivos y chillantes para según ella llamar la atención de los caballeros.
Quien podría culparla, después de todo solo era una madre desesperada por encontrar marido para cuatro mujeres al mismo tiempo.

Pero aún así Penélope lucia hermosa, su cabello todo rizado recogido solo en la parte de arriba y con una pequeña corona que resaltaba el color cobrizo con destellos dorados de su cabello.
Su vestido con una enorme mariposa en todo lo ancho de su pecho lo hacía resaltar un poco más. Aún que no era necesario, ya que Penélope poseía unas curvas muy pronunciadas Justo en los lugares precisos.

La vizcondesa Violet Bridgerton se percato a distancia de que Penélope estaba en la orilla de la pista sola y con su mirada clavada en su hijo Colin. Quien estaba bailando con una señorita, no muy agradable. (Si algo podían hacer los caballeros de la alta sociedad era darse el lujo de bailar con cuanta mujer se les antojara, Por el contrario las damas tenían que esperar a que uno de esos caballero quisiera hacerle la invitación a dicho acto.)

—Anthony querido por favor necesito que saques a bailar a Penélope, recuerda que es su primer temporada y mira —señaló con un gesto en sus ojos —está sola.

Anthony soltó un bufido —está bien madre solo un baile. Y después de esto me dejarás encargarme de Daphne, ¿está bien?
La vizcondesa entrecerró los ojos y apretó los labios como diciendo:
<< esta bien >>  y le dio un pequeño empujón por la espalda para guiarlo de inmediato hacia Penélope.

Cambio el apoyo de su brazo al brazo de su hijo Benedict.

—Tu serás el siguiente ¿entendido?— declaró la vizcondesa con ojos que decían : <<no es una opción.>>
—Como usted ordene su majestad, Oh! perdón, por su puesto que si, será un honor para mi, querida madre. —dijo Benedict con una sonrisa pícara que después se torno a ridículamente tierna.

—¿Me concedería el honor de acompañarla a la pista en el siguiente baile señorita Penélope? —Dijo Anthony extendiendo su mano hacia Penélope e inclinando su cabeza como todo un caballero. No, Como todo un vizconde.
Penélope por fin logró quitar la vista de Colin y dijo
—El honor es todo mio mi Lord —le respondió con mucho entusiasmo, si algo tenía Penélope era entusiasmo y mucha disposición.

En mi mundo es Colin quien me ha regalado mi primer baile como señorita de sociedad pero Anthony es excelente opción también, además somos amigos y tengo tantas ganas de bailar. Pensaba Ella

—Vamos entonces—aclaro Anthony con una sonrisa muy educada llevándola de la mano hasta la pista de baile.
Ya estaban en posición e hicieron la reverencia debida cuando la orquesta daba sus primeras notas.

—Es peculiar el color de tu vestido Penélope, la mayoría suele vestir de blanco en estos bailes. —dijo Anthony con una bonita sonrisa. (Es verdad que Anthony no pensaría en cortejar a Penélope Featherington por más de un motivo: 1) que era demasiado pequeña en edad para las necesidades que se exigía él como vizconde. 2) la había visto crecer casi como otra de sus hermanas y eso le resultaba casi un pecado y 3) tenía más que consciente los sentimientos de Ella por su hermano Colín. Pero aún así no había ningún motivo para no Elogiarla)

—Es horrible verdad —se apresuró a decir Penélope cambiando las facciones de su cara hasta parecer avergonzada.

—No, no me mal entiendas Penélope — dijo Anthony agitando con rapidez su cabeza de un lado al otro en cuanto noto que el rostro de Penélope casi había cambiado de color.—Lo que quiero decir —se apresuró a decir —Es que no eres como la mayoría, no eres como ninguna de estas señoritas y eso es bueno. — aseguró Anthony —Además te sienta muy bien ese color tranquila, es un cumplido.
—Ah! Entonces gracias —dijo recobrando su sonrisa habitual. —es mi primer baile en sociedad y creo que estoy un poco nerviosa.