Capitulo 9

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La sociedad londinense disfrutaba de un día de campo muy agradable Gregory y Hyacinth jugaban, Colin comía un poco de pastas, o más bien muchas!
Dafne estaba sentada sobre una manta esperando encontrar al Duque pero sólo miró a crecida Copper pasar con sus amigas y burlarse en voz alta del infortunio que era tener solo la propuesta de Lord Berbrooke.
A lo que Dafne sólo pudo agachar su cabeza y empezar a imaginar su futuro miserable si eso llegara a ser posible (su matrimonio con Berbrooke)

—Tía si me disculpas tengo una cita con la señorita Penélope —se levantó de su silla acomodando un poco su cabello y quitándole un poco del polvo a su chaqueta. —y no me gustaría hacerla esperar—dijo George
—Violet se limitó a sólo asentir con la cabeza y ver casi con la boca abierta como George caminaba a toda prisa con rumbo a la sombra de la familia Featherington.

—No tenía idea de qué George estuviera interesado en Penélope —dijo Violet con una sonrisa confusa en su rostro. — ¿De qué me perdí alguien me lo puede explicar? —Benedict y Eloise se encogieron de hombros entonces giró su vista a Colin —¿Colin tú sabías algo de esto?

De todos los presentes tenias que preguntarme a mi? De verdad a mi? Pensó Colin y después respondió
—Yo no sé nada madre bailaron en la velada de la otra noche pero yo no sé nada —dijo poniéndose de pie —Iré a caminar necesito aire.

—Señorita Penélope qué hermosa luce esta mañana —Penélope giró un poco sobresaltada no esperaba que llegara tan temprano a buscarla.
—Muy buen día Lord Rokesby para mí también es un placer verle esta mañana, le presento a mi madre y a mis hermanas Prudence y Philipa.

Lady Portia de inmediato se acercó al joven lo miró de pies a cabeza Con una sonrisa y los ojos agrandados.
—Es un placer tenerlo entre nosotros mi Lord. ¿Cuál es el motivo de su estadía? ¿se quedará toda la temporada? —ya empezaba con el interrogatorio. Penélope cerró los ojos y se llevó una mano a la frente estaba realmente avergonzada.
—Es un placer conocerla Lady Featherington y el motivo de mi llegada... la verdad es que estoy buscando algo especial muy especial y si tengo la fortuna de encontrarlo es muy probable que me quede. —le respondió George a Portia, pero no evitó mirar a Penélope cuando le decía esto.

Penélope sintió como sus mejillas empezaban a llenarse de color y de calor también.

—Si no es mucha molestia me gustaría dar un pequeño paseo con la señorita Penélope —expreso George con una muy amable y gentil reverencia
Portia estaba realmente sorprendida de que haya pedido pasear con Penélope creyó que tal vez le interesaría Prudence por ser mayor y más alta, más indicada para él según Portia.
—No puedo dejar sola a mis señoritas sí accedo a esto, tiene que ser a una distancia que yo puedo observarlos desde aquí —termino por responderle.

—No se preocupe le aseguro que no saldremos del alcance de sus ojos le extendió una mano a Penélope quien seguía un poco ruborizada y se dispusieron a caminar tomados del brazo.

—Debe disculpar a mi madre no ha sido su intención interrogarlo de esa manera— fue la primer oración que logró decir Penélope cuando se alejaron sólo un poco.
—No tiene porque disculparse no me sentí para nada ofendido.
Además pienso que este tipo de interrogatorios es normal en este tipo de situaciones —Le respondió George a Penélope dándole una sonrisa muy cautivadora.
Penélope le regresó la sonrisa

—Creo que tenemos una conversación pendiente señorita Penélope
Penélope asintió con la cabeza
—Pienso que es fascinante su profesión, no tenía idea de que usted ejerciera medicina —lo abordó Penélope.
—Lo sé, no es la primera persona que me lo dice creo que es por mi apariencia relajada y liberal mi cabello largo tal vez exprese que no soy muy profesional pero yo le aseguro que mi personalidad no tiene nada que ver con mi profesionalismo en ejercer mi profesión, estoy muy comprometido con mi vocación. —le explicaba George mientras caminaban por el parque.

En mi mundo (Bridgerton) ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora