Gracias Papá por el día de hoy,
hoy vengo a decirte que me he sentido cargada, me he sentido afanada, abrumada... por lo que vivo y estas cosas no me permiten sentir paz.
Por eso yo te escribo, para que tu paz, esa paz que sobrepasa todo entendimiento caiga sobre mi vida. Creo que tú eres mi amparo y mi fortaleza, mi ayuda segura en momentos de angustia.
Tu palabra dice que: no se angustien por el mañana, el cual tendrá sus propios afanes. Cada día tiene ya sus problemas. (Mateo 6:34) y yo me aferro a esa palabra, te entrego todas mis cargas, todos mis problemas, mis miedos y todos los afanes en los que vivo.
Dios, sé que tu amor por mí es real y seguro. Confío en que absolutamente nada, ninguna preocupación o temor que tenga, puede separarme de tu inagotable amor por mí. Gracias por amarme tanto a pesar de mis errores y pecados.
Sé que te preocupas por mi vida y por las personas que hay en ella, incluso mas que yo. Es increíble ser tan cuidada por ti. Deposito mis preocupaciones y ansiedades delante de ti, sabiendo que tú las quitaras de mi mente.
Príncipe de Paz, te pido que vengas a sustituir mis preocupaciones por confianza y mis miedos por paz.
En el nombre de Jesús, amén.
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Cartas para Dios
SpiritualCartas de quien no merecía nada para Aquel que lo dio todo por mí; quién es tan complejo que no entra en un adjetivo y aunque trate de imaginar es demasiado para mi mente. Versos dedicados al creador de la vida, dueño del universo, el amor verdadero...
