5.2. Júpiter y su orbita [Traición]

123 31 9
                                    

Entre giro y vuelta, entre la órbita de Júpiter y la rotación del Sol, cualquier espectador despistado, un pasante que se encuentre la escena de curiosidad, pensaría que ese par está danzando.

Los primeros que existieron en ese paraje solitario, en esa nube, en esa cuna. El brillante sol y el coloso de sus planetas, su primer planeta. Tomar la mano del enemigo en una danza astral milenaria puede sonar encantador, aunque recuerda que su toque te puede quemar.

Júpiter orbita precavido a la distancia, pensando en la desgracia del pobre Mercurio y su triste destino en el que el sol lo devorara por completo.

Nada te ganas con acercarte al egocéntrico Rey Sol, jamás.

La mirada de Adrien estaba sobre ella, con su espalda inclinada mientras que su mano envuelta en un elegante guante blanco se ofrecía ante ella para ser sujetada

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

La mirada de Adrien estaba sobre ella, con su espalda inclinada mientras que su mano envuelta en un elegante guante blanco se ofrecía ante ella para ser sujetada. Chloe sintió un cosquilleo, como si la muerte misma le susurrara que esa era la peor idea de todas.

El fanfarrón joven Toscano perdió de un momento a otro toda su gallardía, porque simplemente quedó congelado ante el hombre que tenía frente suyo y que había interrumpido sorpresivamente su discurso estúpido de ligoteo.

—Sí, su majestad.— respondió tan rápido que a penas se le alcanzó a entender. Pero aún después de esto, Chloe seguía sin tomarle mano.

Entendía perfectamente porqué él estaba haciendo esto. Quería seguirla torturando, presumirle que aún dándole el permiso para no asistir a la fiesta, ella se sometía a su voluntad; ese maldito desgraciado no perdía la oportunidad para restregarle en la cara todo el poder que ahora tenía.

No era una coincidencia, podía verlo en sus ojos asquerosamente verdes: él sabía bien quien se ocultaba detrás del antifaz que llevaba puesto.

—Creo que deje en claro que no sería tu acompañante en este baile.

La respuesta de la fémina no lo tomó por sorpresa, una parte de él la esperaba. Sonrió tranquilamente y levantó su espalda para mirarla frente a frente sin dejar de ofrecerle su mano.

—¿Entonces a que has venido al baile? ¿A despejarte solamente? ¿A buscar algún prospecto que esté interesado en ti? Créeme, no creo que encuentres alguien mejor que yo.

—A mis ojos, tú eres el peor prospecto de esta fiesta.— contestó de inmediato Chloe, enmarcando en cada una de las palabras el desprecio profundo que sentía por él.

El rey guardó sus palabras por un momento y puso una expresión seria que hizo erizar la piel de su espectadora. Justo ahora en su cabeza él estaba planeando el cómo salirse con la suya. Sí, quizás Adrien había cambiado mucho desde el golpe de estado; pero ella ya había empezado a conocer a este nuevo.

—Chloe.— Lo neutro de su voz la hizo temblar, su mirada estaba llena de decisión y un porte intimidante y elegante a su vez. Era como ver a un águila observar escondida en las ramas a su próxima presa.— Baila conmigo, es una orden de tu rey.

Ladrona de tronos (Lukloe)Where stories live. Discover now