Nuestro Destino

Capítulo 17

Todo estaba completamente oscuro...

No había nada...

Vio una luz a lo lejos e intentó acercarse, para su sorpresa... podía moverse... moverse hacia la luz...

Avanzó hasta esta y finamente se detuvo mirando... aquella escena...

Aquel momento en que Onigumo la había atacado, en aquel tiempo atrás cuando luchaban con Miroku y Sango... en aquel tiempo... cuando Inuyasha estaba enamorado de Kikyo... cuando había luchando contra Inuyasha en forma de escorpión cerca de la cueva donde Naraku se formó... pero este Onigumo... tenía un rostro diferente... y ahora lo recordaba claramente...

Sintió que caía al vacío y todo se volvió negro una vez más...

Repentinamente estaba en la cueva con Onigumo... el Onigumo de ahora... estaba sonriéndole usando simplemente una Yukata negra... negra como sus ojos... ella nunca había creído que algún humano pudiera nacer con tales ojos... pero Onigumo por lo visto si había podido nacer con tales ojos... le sonrió de una forma pervertida y comenzó a avanzar hacia ella... quiso retroceder, alejarse y no pudo moverse...

Onigumo se carcajeó suavemente... usando una vos muy similar a la de Naraku...

"Cierta bruja me enseñó un par de hechizos..."

Ella simplemente le vio aterrada y Onigumo apartó de su pecho la Yukata, para su sorpresa ese pecho tenií cicatrices, no era un pecho perfecto, la sonrisa que le dio cuando se acercó a ella le estremeció... y comenzó a querer escapar... esto tenía que ser un sueño... una pesadilla... no era real...

El hombre se rió por lo bajo y bajó su Kosode... ella intentó moverse de nuevo y no pudo...

'No... déjame...'

No podía si quiera hablar o gritar...

'Inuyasha...'

Cuando comenzó a tocar su piel desnuda sintió repulsión, trató de moverse cuanto pudo gritando en su mente, llamando a Inuyasha... queriendo despertar...

"Nadie me dice que no miko, y aunque sea de esta forma, serás mía."

"No!"

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Abrió los ojos de golpe sudando, sintiendo su corazón latir a mil por hora y sabiendo que estaba completamente aterrada, había sido un hechizo... algo... sentía que le faltaba el aire y se sentó en el futón mirando a su alrededor en la cabaña... todo estaba bastante oscuro pero no de una forma que no pudiera ver nada más... se abrazó a sí misma cubriéndose con la frazada aún sintiendo la tela del Kosode cubriéndola... se sentía desnuda... abusada...

Inuyasha entró en ese momento a la cabaña mirándola preocupado...