ASUNTO ARREGLADO

497 58 13
                                    


En la habitación al fondo del pasillo se encontraba la otra pareja, jimin no había parado de reclamarle a su novio por haberse expuesto de esa manera, no había forma de que entendiera nada de lo que yoongi le explicaba, tenía mucha pena y rabia por lo alocados que habían actuado ambos amigos, no pensaron en nada ni en nadie.

--¡ya jiminie, llevas 3 horas exactas regañándome, amor sé que fuimos imprudentes, pero te prometo que esto no fue culpa nuestra, estoy seguro que el idiota de jaemin nos hizo caer, ya lo había intentado una vez durante la carrera, pero fue tanta nuestra efusividad que no nos percatamos que lo teníamos tan cerca, necesito averiguar que paso exactamente, ese idiota casi nos mata!--.

Jimin miraba a su novio molesto, pero sabía que debían hacer algo, por el momento solo quería que yoongi se recuperara, no iba a ser fácil para él, el doctor les había dicho que era posible que el trauma que recibió por el golpe le deje leves secuelas, siendo una de ellas, episodios fuertes de jaquecas y mareos, inclusive posibles perdida del conocimiento, ambos habían quedado un poco asustados, jimin se encargaría de que su novio no tuviera impresiones fuertes, ni pasara malos ratos, pero eso no le impidió darle un buen jalón de orejas.

Ya tendría tiempo de averiguar más sobre el asunto de jaemin, por el momento era tiempo de regaloneo y alguno que otro besito, ambos estaban abrazados cuando de repente la puerta fue abierta bruscamente, jimin giro su cabeza para ver quien había irrumpido en la habitación de esa manera tan brusca, cuando vio a las personas paradas en el umbral de la puerta, su mundo dio vueltas, se paró rápidamente quedando frente a la camilla y dándole la espalda a su novio.

Yoongi al ver la reacción de su muñeco, se sentó en la camilla mirando a todas las personas que estaban en su habitación, carraspeo un poco y hablo.

--jimin, ¿conoces a estas personas?-- le preguntaba yoongi.

Jimin ya estaba bastante nervioso, llevaba días en ese hospital que olvido por completo a esas personas, en su cabeza no había nada más que interés de volver a ver a su novio, ni sus padres ni nadie pasaba por su cabeza, se olvidó por completo de avisarles que estaba bien.

—Emm, si yoongi, los conozco, e-ellos son mis padres—. Decía jimin sin quitarle la mirada a su padre, si bien ellos amaban a jimin y le daban todo lo que el rubio quería, no dejarían pasar semejante bajeza, su hijo no podía estar con ese tipo.

­­ — ¡Oh!, cariño pero no los dejes ahí afuera, por favor pasen— les decía yoongi de manera educada.

Los padres de jimin asintieron y entraron, no decían ni una palaba, solo miraban a su hijo muy decepcionados, este solo agacho su cabeza y apretó sus puños, gesto que no pasó desapercibido por min yoongi, arrugo su entrecejo y luego miro a los padres de este, viendo que ellos no estaban ahí por gusto, y ahí fue cuando entendió...ellos no sabían de él.

Su pecho dolió, sabia, él sabía que no era apto para un chico como jimin, suspiro demostrando tristeza agacho su cabeza y miraba sus dedos, no quería hablar, pero debía romper el hielo, debía demostrar que él podía ser perfecto para su muñeco, aunque no tuviera dinero ni lujos, él amaba al rubio y estaba dispuesto a todo por él.

—Mi nombre es Min Yoongi, no tengo dinero, pero si tengo algo mucho más valioso, y es el amor que siento por su hijo--, levanto su cabeza y miro a los ojos al hombre mayor.

Jimin miro sobre el hombro a su novio, lo amaba tanto, lucharía por él, conectaron miradas y ambos se sonrieron.

El hombre mayor carraspeo y miro serio a yoongi, el chico era educado pensaba, pero sigue sin ser perfecto para su hijo.

—Mi nombre es Park Hyung-sik y ella es mi esposa Park Shin-hye, y no solo se necesita amor para ser felices muchachito, mi hijo ha tenido todo, ¿serás capaz de cumplir con los requerimientos de nuestro cachorro?, además déjame decirte mocoso, jamás te he visto, y yo no he aprobado ninguna relación de mi hijo, así que entenderás que eres y serás un desconocido para nosotros—.

Tocando el cieloDove le storie prendono vita. Scoprilo ora