12

201 15 7
                                    

Días y semanas pasaban y jungkook no recibía nada, seokjin y namjoom estaban perfectamente bien, y taehyung salía tanto tiempo con la mujer que ya ni siquiera sabía si algún día se enamoraría de ella, lo aburría tanto y no pensaba en otra persona que no fuera el, pero tal vez el ego lo había consumido había borrado el número de jungkook y bloqueado así que no lo tenía, mierda.

Tras la 3ra salida de la 3ra semana taehyung finalmente decidió fingir una boda con su madre, la insistencia lo estaba cansando, todos los días escuchando la misma mierda impedía qué sintiera algo por la mujer, pero estaba harto de esto.

-Bueno, amm, yo te veo mañana Lee, adiós.-finalizo sus palabras levantándose de la mesa sin despedirse más llendo en rumbo con su madre.

Sin embargo antes la mujer lo tomo por el brazo de teniéndolo.

-Que haces lee?.-pregunto abriendo los ojos ante esto.

-Oh amor, no seas tan seco, hablame lindo.-sonrio la mujer.

Y ante sus palabras taehyung sintió asco soltandose con brusquedad de la mano de la mujer sin decir nada más en camino a su madre.

-Y que tal? Ya son varias citas querido ya serán algo?.-pregunto la mujer entusiasmada.

Estaba indeciso.-Nos vamos a casar.-suspiro cerrando los ojos con arrepentimiento.

-En serio?!.-dijo la mujer feliz.-me alegro tanto de verdad! Estoy tan feliz hijo.-lo abrazo rápidamente, estaba feliz pensando que su hijo ya podría haber olvidado al fin a ese hombre pero no era así.

El rubio respondía a su abrazo arrepintiendose de cada palabra que decía, se odiaba a si mismo.

Los dos adolescentes estaban estresados, jungkook no sabía nada de taehyung y taehyung no sabía nada de jungkook. Pero nadie hizo nada, ninguno se busco uno al otro, ninguno se habló y tampoco dieron nada de interés uno al otro.

Entonces 3 meses pasaron, jungkook comenzaba a perder interés, la falta de verlo había hecho que este dolor se fuera, no había sido fácil era por eso que jungkook evitaba verlo o saber algo de él, sabía que si lo veia lo volvería a amar como la primera vez, o al menos eso pensaba.

Después de un largo día de trabajo jungkook llego consumido por el cansancio a su casa, no quería hacer nada más que llegar, comer y relajarse y así fue, pasando el primer taxi levanto la mano para irse;tras pocos minutos finalmente llego, pago y salió del auto y una vez afuera busco sus llaves para abrir la casa, las saco de sus bolsos y en la perilla dando un par de vueltas para abrir la puerta.
Y una vez adentro suspiro con tranquilidad, por un momento se había olvidado de la antigua presencia del chico y de como lo recibia, aventó sus llaves a la barra para después tomar un pedazo de pastel qué sobraba de la nevera e ir a la sala. Se sentó para prender el televisor y comenzar a comer.

°°°

La boda se acercaba, faltaban solo 4 meses, y taehyung ya iría por el año de no saber nada de jungkook, todo se había pasado tan rápido y tal vez ya lo estaba olvidando, tal vez ya no habría otro capítulo de ellos o al menos eso pensaba hasta que namjoom entro al cuarto de su hermano tomándolo desprevenido.

-Taehyung!.-grito el castaño.

-Mierda nam me espantaste.-reaccionó rápidamente el menor.

-Ush miedoso, ese no es el punto, mañana saldré con jin y va a ir jungkook, quieres ir?.-pregunto.

En el momento al por ese nombre el menor sintió un peso en su pecho adjunto con un nudo en la garganta qué le provocaban unas grandes ganas de llorar pero a la vez haciendo que sus ojos se iluminarán notoriamente y ante esto su hermano sonreía levemente, le agradaba ver ese brillo qué ya se había ido, sin pensarlo dos veces solo asintió feliz, más que nunca por que tal vez por fin podría verlo, lo malo era que el pelinegro no estaba avisado de la llegada del rubio para ese día.

When I see you cry| KTH × JJK Where stories live. Discover now