"Roomie" - [HaruKyu]

cap. 18: Haruto está enamorado

En medio de clases, la mayoría de los presentes ponían atención, otros realmente no mucha. Y entre estos últimos, estaba Haruto, quien no podía dejar de pensar en lo ocurrido desde la semana pasada.

Recordaba tener a Junkyu tan cerca de él. Juraba que podía sentir sus respiraciones mezclarse, sus narices apenas rosarse... estaba tan cerca de sus labios que no podía dejar de ver esa imagen pasar por su mente.

— Les digo que Haruto está raro desde la semana pasada. — susurró Asa. — Algo le pasa.

— Ya vi a lo que te refieres. — respondió Jeongwoo. — ¿Qué le sucede?

Haruto soltó un suspiro, desbloqueando su teléfono sobre la mesa y mirando con una sonrisa a su fondo de pantalla. No sabía por qué, pero mientras veía las fotos que se había tomado el día de la competencia, había puesto como fondo de pantalla, su foto junto a Junkyu y Canny abrazándolos a ambos.

Junghwan hizo un par de señas, intentando señalar que era lo que Haruto veía en su teléfono, y después simplemente susurró:

"Es Junkyu"

Haruto levantó la mirada al escucharlo.

— ¿En dónde está Junkyu? — preguntó, mirando a la puerta y por las ventanas.

Llamando la atención de su profesor y del resto de su salón.

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Y para Junkyu las cosas no eran diferentes. Recordaba tan claro la mirada de Haruto sobre él, como tan pronto sintió como sus manos rodeaban su cintura se puso tan tímido frente al más joven. Tenía sus labios tan cerca de los suyos.

Su cordura le reclamaba el no haber echo nada al respecto, pero su corazón le gritaba en latidos lo mucho que hubiera deseado ese beso.

Pero, ¿qué habría pasado de ser así? Eso era una locura. Haruto seguramente sólo le traía una calentura o una simple curiosidad, ¿qué más podría ser?

Era ridículo pensar en otra cosa, porque, ¿cómo podría fijarse Haruto en alguien como él? Haruto era tan joven, ¿cómo iba a comprometerse a alguien que tenía hijos?

Y Haruto pensaba exactamente lo mismo, ¿acaso se estaba enamorando de Junkyu? ¿Pero en qué estaba pensando? ¿Cómo Junkyu iba a aceptar a alguien tan joven e irresponsable como él? Porque Junkyu no necesitaba un niño, necesitaba a un hombre dispuesto a todo por él, alguien tal vez como.... claro, como el profesor Mashiho o el profesor Yedam. Ellos podrían darle todo lo que él no podía. Pero, ¿cómo aceptar eso? Tan sólo la idea de verlos juntos ya le molestaba. Junkyu se merecía algo mejor... ¿algún día podría él ser suficiente para su hyung? Ni siquiera entendía por qué deseaba tanto ser suficiente para él.

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— Adelante, pasen. — habló Haruto, abriendo la puerta y dejándolos pasar primero.

Los cinco entraron, pasando directo a la sala.

— ¿No hay nadie más? — preguntó Doyoung, notando qué no había ni rastro de Canny o de Junkyu.

— Debió salir a hacer sus compras. — respondió el japonés. — ¿Quieren tomar algo? Hice limonada ayer.

— Claro. Te ayudo con los vasos. — respondió Jeongwoo siguiéndole el paso a la cocina.

El resto pasaron a la sala, acomodandose sobre la alfombra y empezando a sacar sus cosas.

— ¿Y si se lo preguntamos a Haruto solamente? — preguntó Asa de repente. — Tal vez así nos saque de dudas, o hasta podríamos ayudarlo.

— No lo sé. Usualmente lo niegan al principio. Es lo que hacía Jeongwoo con nosotros. — respondió Junghwan. — Tal vez debamos recaudar nuestras sospechas.

— y podríamos compararlas con el blog que encontré. — dijo Pharita abriendo la pestaña en su celular.

Los cuatro se acercaron para ver mejor y poder hablar al mismo tiempo.

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"Dice que la atención sobre esa persona es más, comparándola con la que pone hacia otras personas."

— Oye, Haruto, ¿podrías pasarme ese vaso?

— Junkyu hyung llegó. — respondió al escuchar la puerta abrirse. Fue inmediatamente a recibirlo, ignorando por completo a su amigo, quien, por su parte, regreso con los demás.

"Los ofrecimientos de ayuda y preocupaciones sobre esa persona son especialmente resaltados."

— Junkyu hyung, déjeme ayudarlo con eso.

"Halagos constantes. Se da cuenta incluso de lo más mínimo."

— Se le ve bien ese suéter, ¿es nuevo?

— Algo así. No lo había usado realmente, ya que lo estaba costurando, y estaba haciendo uno para Canny también. — respondió, abrió la carriola y dejó ver a su pequeña,  quien dormida usaba su pequeño suéter.

— Se ve adorable. Les queda muy bien, Hyung. Aunque, realmente, a usted todo le queda bien.

"La atención especial sobre esa persona."

— ¿Quiere que le ayude a sacar las compras? ¿Canny necesita un biberón? Puedo prepararlo.

— Está bien, Ruto. Yo saco las cosas, y sobre el biberón, no quiero molestar, deberías ir con tus amigos ya.

— Pero no es una molestia, hyung. Puedo hacerlo. — insistía el más joven.

— De verdad, así está bien. Canny aún dormirá un largo rato y me quedaré con ella, también estoy cansado.

— Si necesita algo, llámeme y vendré enseguida.

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Los cinco se miraron entre sí.  Esto era una locura, todo concordaba.

— Ya vine. — llamó Haruto, recibiendo inmediatamente la mirada de todos sobre él. — ¿Qué les pasa a ustedes?

— ¡Te gusta Junkyu! — acusaron todos al unísono.