"Roomie" - [HaruKyu]

cap. 22: un amor que no se puede ocultar

Junkyu regresó a la casa con las compras de la despensa, abrió la puerta y entró.

- Hyung...

El mayor volteó algo incómodo.

- ¿Quiere que le ayude?

- N-no... yo puedo...

Junkyu pasó de largo hacia la cocina, siendo seguido del más joven que mantenía cierta insistencia.

- Hyung... tenemos que hablar.

- No tenemos nada de qué hablar. Por favor, necesito acomodar mis cosas.

Junkyu empezó a sacar sus cosas e iba directamente a acomodarlas.

- ¿Y Canny?

- Está con Jihoon. Se quedará con él esta noche, la llevó a la feria.

- Entonces si podemos hablar de nosotros. - dijo Haruto interponiendose en su camino.

- No hay un "nosotros".- lo esquivó, siguiendo su camino

- Pero lo de anoche...

- No pasó nada anoche. - respondió dándose la vuelta.

Junkyu dejó las cosas sobre la mesa y salió de la cocina casi a prisa, directo a su habitación.

Haruto sólo escuchó cuando cerró la puerta de su habitación con seguro.

Se sentó a la mesa mientras se lamentaba a sí mismo.

Tal vez debió pensar mejor las cosas antes de hacerlo, pero la verdad es que de alguna manera no se arrepentía. Todavía podía recordar los labios de Junkyu en la noche anterior. Fue el mejor beso que pudo tener. No se arrepentía en lo absoluto, sabía que Junkyu también lo deseaba tanto como él, no podía negarlo.

.

Al terminar su ducha, Junkyu se miró al espejo, aplicando un poco de crema a su rostro, después, comenzó a peinar su cabello mientras usaba la secadora para secarlo.

En ese momento escuchó la.puerta abrirse y después cerrarse. Que raro, por poco piensa que era la de su habitación la que se abrió y cerró.

Tal vez era la de Haruto.

Al terminar, ajustó bien su bata de baño y guardó todo lo que había usado en ese momento.

Tomó su toalla del cabello y salió del baño, al mismo momento en el que Haruto salió de su habitación.

- Hyung... sólo quiero hablar de lo que pasó...

- Ya olvídalo. - respondió Junkyu. - Lo que pasó estuvo mal y eso no se puede cambiar. Jamás debió pasar, ¿entiendes? Tengo una hija y tú tienes una vida completa que seguir.

Haruto tomó su mano, evitando que siguiera su andar.

— Hyung, por favor... tenemos que hablar de lo que pasó.

— Sueltame. No tenemos nada de qué hablar. — protestó el mayor forcejeando para soltarse.

Junkyu logró soltarse, alejándose un poco del menor.

— Ese beso fue un completo error. Nos dejamos llevar por la discusión que teníamos. — explicó. — Lo olvidaremos, ¿listo? Todo bien.

Junkyu se dio la vuelta y estuvo a punto de decir algo más cuando Haruto lo interrumpió.

— ¡¿Sólo eso fue para usted?! — gritó.

— ¡No me levantes la voz!

— ¡Entonces no me mienta! ¡Sé que le gustó tanto como a mí! ¡En ese beso me di cuenta de que usted siente lo mismo que yo!

— ¡¿Y qué es eso que siento, según tú?!

Haruto lo tomó de los brazos y lo atrajo hacia él plantando un beso corto en sus labios, el cual rápidamente fue interrumpido por una bofetada.

— ¡Estás haciéndolo de nuevo! — gritó Junkyu. — ¡Te dije q...!

Haruto lo acorraló contra la puerta de su habitación mirándolo fijamente.

— Yo sé que quieres tanto como yo... pero tienes miedo de que te vuelvan a lastimar...

— Eso no es cierto... no sé de qué me hablas. — respondió volteando la cabeza para evitar el contacto visual.

Haruto rodeó su cintura con su mano izquierda, mientras que la otra la llevó para el rostro de su mayor, haciéndolo voltear.

— ¿Por qué si lo sabes me haces esto? — preguntó Junkyu sintiendo tan cerca los labios del menor. — No lo hagas, por favor... sabes que lo deseo también y yo...

Haruto finalmente unió sus labios con los de Junkyu, sintiendo como las manos de este rodeaban su cuello.

Volvía a tener esos dulces labios que tanto lo seducieron aquella noche. Su lengua volvió a deleitarse con la dulzura de la lengua ajena que con timidez aceptaba el contacto.

...

— Quiero ese, por favor. — señaló Jihoon al osito que su sobrina señalaba con tanta emoción.

La vendedora lo entregó, y este pagó, dejando el cambio como propina.

— Le mandaremos una foto a tu mamá de tu nuevo peluche, ¿qué dices, princesa? A puesto a que le gustará.

Jihoon sacó su teléfono y tomó una selfie de ambos mientras Canny abrazaba su osito.

Constantemente Jihoon era invitado a ciertos lugares por la influencia que tenía. Solía invitar a Junkyu junto a Canny, pero en esta ocasión, Junkyu decidió no asistir ya que el asunto con Yoshinori lo tenía algo estresado. Ya en otras ocasiones había salido solamente con Canny, así que está estaba muy acostumbrada a sólo estar con Jihoon y no tenía problemas, este era un tío muy consentidor con ella.

— Que raro. Usualmente Junkyu responde rápido. — dijo mirando su teléfono. — Tal vez se durmió temprano. Espero que pase buena noche, el pobre necesita relajarse un poco.