La clase A y el misterio del Wonder duo [KatsuDeku]

IV

—¿Entonces, a dónde se fueron? —pregunté al llegar a la mesa donde Kaminari, Kirishima y Sero comían.

—No lo sé, Bakugo se fue cuando llegué —respondió Sero con la boca llena de vegetales.

—¡Ese loco explosivo secuestró a Deku enfrente de mí!, ¡no sé a donde lo llevó!, ¡los perdí en la biblioteca!

—¿Crees que estén peleando de nuevo? —preguntó Kirishima, quien había terminado de comer—. ¿Deberíamos ir a buscarlos?

—¡Sí, vamos!, ¡no voy a dejar que ese mastodonte lastime a Deku! —grité.

Fui corriendo hasta la mesa donde solía comer con las demás y le pedí a Momo algunos walkie-talkies, que ella hizo cuando les expliqué mi plan de espiar a nuestro wonder duo. Todos dejamos el almuerzo y fuimos directo a buscar a ese par de problemáticos, pues nadie quería llevarse otro regaño de Aizawa si ellos estaban peleando.

—No están en la biblioteca, cambio —susurró Momo en la línea.

—Tampoco en el gimnasio, cambio —murmuró Kirishima.

—No están en los vestidores de chicos, cambio —dijo Hagakure.

—¡¿Tú que haces en los vestidores de chicos?!, cambio —gritó Mina.

—Tampoco están en los vestidores de chicas, cambio —susurró Mineta.

—Voy a matarte pervertido, cambio —gruñó Jiro.

—Concéntrense en la misión, cambio —dije a través de la línea.

Me moví a través del jardín, buscando entre los árboles, no estaban en los espacios para hacer deporte, no estaban detrás de la escuela, nadie los había visto dentro, ¿entonces dónde demonios estaban?

Me escabullí entre los arbustos al puro estilo James Bond, pero no los ví por ningún lado. Recorrí esa pared viendo a través de los cristales, quizás estaban en alguna de las aulas vacías.

Iba a meterme por una ventana, pero un grito puso en alerta mis sentidos de espía, esa era la voz de Deku, no había duda.

—¡Kacchan, suéltame! —gritó.

—Aquí Uravity, los encontré. Están en la azotea y están peleando, todas las unidades, muévanse, voy a entrar —susurré contra el walkie-talkie.

Use mi quirk para llegar a la cima del edificio, justo a tiempo para ver a Bakugo derribar a Deku contra el suelo.

—¡Estás arrestado loco explosivo!, ¡aléjate de la pelusita verde y pon las manos en la cabeza! —grité.

Ambos me miraron aterrados, los había descubierto en medio de una pelea, saben que están en problemas, pero no caeré si tratan de persuadirme de no decirle a nadie.

—¡Ochako, no es lo que parece! —gritó Deku.

—¡Tienes derecho a guardar silencio, Midoriya! —gritó Kaminari, que acababa de llegar a la cima.

—¡¿Qué carajos creen que hacen?! —regañó Bakugo.

—¡Las manos detrás de la cabeza, Explosion Murder! —gritó Mina, quien llegó rodando por el suelo, apuntando con una pistola de agua al loco explosivo.

—¡Tú también Midoriya, no dejaremos que nos regañen a todos por sus peleas otra vez! —gritó Momo, uniéndose a Mina.

—Chicos, no estábamos peleando… —murmuró Deku.

—¡Te pusiste rojo!, ¡eso te delata, Deku! —le grité—. ¡Pon las manos detrás de la cabeza!

—¡Que no estábamos peleando, carajo! —gritó Bakugo amenazándonos con explosiones.

—¡Se está poniendo agresivo, disparen! —Momo le había dado una pistola de agua a todas las chicas, y estaba creando más para el resto de la clase que comenzaba a llegar.

Le dispararon a Bakugo, pero al estar Deku debajo de él ambos terminaron empapados. Bakugo se abalanzó sobre las chicas intentando destruir las pistolas de agua. Dark Shadow lo sostuvo y lo alejó del grupo.

—¡Bastardos, voy a matarlos! —nos amenazó.

Estábamos tan preocupados por Bakugo, que no notamos a Deku abrir la manguera a presión de uno de los contenedores de agua, toda la azotea se inundó en cuestión de segundos, y la clase fue arrastrada, soltando sus armas en el camino.

—¡Nunca podrán detenernos, héroes! —gritó Deku con una risa.

—¡Atrápenlo! —ordenó Momo, poniéndose de pie, con un arma nueva.

—¡Ya fue suficiente!, ¡están todos castigados!

Todos nos congelamos en nuestros lugares. Desde el suelo Aizawa sensei nos miraba con enojo, estábamos en serios problemas; aunque al menos el director Nezu y Midnight parecían bastante entretenidos.

—¡Vayan al aula, ahora! —gritó Aizawa—, ¡cuando las clases terminen van a limpiar este desastre!

Demonios. Contra nuestra voluntad terminamos caminando entre los pasillos con toda la escuela mirándonos, claro, todos estábamos empapados.

—Todo por culpa de los problemáticos —soltó Mineta.

—Creí que estábamos jugando a los héroes y villanos… —Deku se interrumpió con un estornudo, rayos, creo que se va a enfermar.

—Deku, no estábamos jugando, todo esto es culpa de los idiotas, ¡¿qué demonios se supone que hacen espiando a la gente?! —se quejó Bakugo.

—¡Si no se la pasaran peleando no tendríamos que hacerlo, nadie quiere terminar castigado por su culpa! —reprochó Mina.

—¡¿Y que mierda se supone que terminaron causando?!, ¡¿eh?! —rebatió Bakugo, aunque claro, el loco explosivo tiene un punto.

—¡Están castigados, dejen de gritar en los pasillos! —Aizawa no parecía nada feliz. Sé que todos nos encogimos en nuestro lugar, nos esperaba una larga semana de tareas extra por nuestra pequeña travesura.

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Chale, quiero vacaciones para leer (y escribir) fanfics a lo desgraciado :(