Capítulo 2 - Observación

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Con algo de reacción restante, sintió pasos acercándose a la habitación. Rápidamente saltó en su colchón llegando a su closet, escondiéndose justo antes de que la puerta se abriera.

- El grito vino de aquí... - Constantino abrió la puerta de golpe, Trevor iba tras él, ambos inspeccionando la habitación con la mirada.

- Aquí no hay nada, es mejor que nos larguemos. No queremos molestar a Jimmy y terminar en el basurero. – El moreno se fue, dejando al pelinegro. Este miró detrás de sí, asustado al ver que Pete se acercaba a la habitación, corrió a la salida.

El castaño traía una manzana, un sándwich y otra Beam Soda de la máquina expendedora.

- ¿Jimmy? – El castaño puso las cosas sobre la mesita de noche, algo triste al notar que Jimmy no estaba en cama.

Por un momento, el pelirrojo pensó en salir del armario y pedir la ayuda de su amigo, pero un temor e instinto de supervivencia lo mantuvieron en el closet con las manos tapando su boca.

Kowalski fue al escritorio de Jimmy, rebuscó un lápiz y una hoja para dejarle una nota y marcharse con la cabeza baja.

Afortunadamente su amigo si conocía la definición de privacidad cerrando la puerta, por lo que Jimmy pudo salir silenciosamente, pero en calma. A pesar de ello, fue de puntillas a cerrar la puerta con seguro y las persianas.

Una vez lejos de ojos curiosos, Jimmy se quitó los pantalones, luego su camisa y chaleco de la escuela. Con la puerta del armario abierta, se observó de cuerpo completo. Era simplemente impactante. Sus labios de por si carnosos lucían más rojizos de lo normal, sus ojos estaban levemente más abiertos, por lo que su tono marrón era visible. Sus pecas resaltaban juguetonamente en su rostro, claramente más fino como notó al tacto hace unos momentos. Su cabello largo hasta sus costillas, pelirrojo cobrizo... justo como era antes de raparlo por el incidente en su séptima escuela. Bajó la vista, sus senos...

Dios, nunca había visto unos reales antes. Solo en las revistas que encontró en la guarida Nerd debajo de la tienda de comics. Inconscientemente mordió su labio inferior y sus manos se acercaban lentamente. Cuando los tocó, tomó el peso y la textura. Eran blandos, pero con cierta carga. Sus pezones lucían simplemente perfectos a sus ojos. Una mano se quedó arriba mientras la otra bajaba por su cintura. Estaba definida, a pesar de que su cuerpo seguía siendo, ciertamente, voluminoso. Aún sin despegar la mirada, bajó lentamente su ropa interior. Tenía una... una vulva. Su vello púbico la cubría, pero sus dedos tocaron con cuidado. Apretó los labios con fuerza, la sensación de verla reflejada y tocarla producía escalofríos en su espalda. La soltó y volteó lentamente de perfil. ¿Ese era... su trasero? Redondo, con pecas y pequeñas estrías al costado.

Wow... esto era simplemente increíble.

Tomando una respiración en verdad profunda, alejó la vista de espejo y se vio por sí mismo. Lágrimas de impotencia y extraña sensibilidad se deslizaban por sus mejillas. Se sentó sobre sus talones, un leve sollozo salió sin poder controlarse. ¿Por qué estaba pasando esto? ¿Por qué demonios no despertaba?

La campana de la clase de las 9 lo sacó de sus pensamientos. Era su oportunidad para salir de la academia... pero ¿Cómo?

Secando sus mejillas con el dorso de sus manos, se levantó y tomó unas prendas del armario.

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5 minutos después, Jimmy abrió la puerta y miró en todas direcciones. Al no encontrar a nadie, estaba por irse hasta que recordó que mejor debía llevar algo de arsenal por si acaso. Se devolvió rápidamente en búsqueda de una mochila olvidada, después de unos cuantos movimientos y medidas, guardo polvos pica – pica, bombas apestosas y petardos que fabricó con su juego de química. Tomó su Skate que reposaba junto al escritorio, lo recogió y al levantar la vista notó la nota que Pete había dejado.

Experimento 23 (Bully GenderSwap Fic)Where stories live. Discover now