1.Benvenuto

778 64 10
                                    

"Necesitas a alguien que te abrace los monstruos 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"Necesitas a alguien que te abrace los monstruos 

y que no le tema a tu tormenta..."

Mr. Yovo


Clic...clic...clic.

Los Stilettos repiqueteaban en el mármol de la agencia con una pasividad y sensualidad que muchas cabezas les fueron imposible no girar a su dirección. Con un caminar firme y seguro Gia William se adentró en el corazón de la central internacional del FBI. Habían interrumpido sus vacaciones para una misión importante de última hora. Su letalidad, improvisación y adaptabilidad la hacían una de las mejores agentes para misiones encubierto. Hoy no sería diferente, la esperaban con una bomba con sabor a café amargo y bien cargado.

—Hace diez años nos infiltrarnos en el círculo de Renzo Calavera, pero la información nunca nos fue entregada porque nuestro agente fue descubierto y asesinado. Ahora es aún más cerrada, siendo imposible volvernos a infiltrar. —El coronel Simon Tuner, explicó mostrando diferentes imágenes. —Sin embargo, se nos abrió una ventana. Un contacto del submundo nos avisó de que están buscando un empleado. Lo malo, es que estamos a ciegas. No sabemos en qué condiciones, ni por cuanto tiempo y mucho menos el lugar del trabajo.

La puerta se abrió para revelar un señor en canas, pero fuerte. El coronel Turner lo saludó y lo presentó como el General Robert Mount. Venía de intercambio desde Francia para aportar información y supervisar la misión.

—A los Calavera no les tiembla el pulso para matar a una mujer, pero antes les gusta jugar con las víctimas. Esta misión se clasifica como una de las más peligrosas que esta agencia haya tenido la desgracia de tener. —General Mount dirigió su mirada a Gia. —Un solo error y mueres.

Gia, quien, si el General esperaba que se inmutase, no lo hizo. Abrió con tranquilidad la carpeta viendo con determinación las fotos con cada nombre del círculo íntimo de Renzo. La única reacción de su parte al decir su nombre en la cabeza fue apretar el pulgar en el papel. Los Calavera le debían una vida desde hacía cuatro años. El coronel Turner lo sabía y por eso la llamó. Eso le decía que la respetaba lo suficiente como para creer que sus sentimientos de venganza no comprometerían la misión, así de alta la tenía.

No había nada nuevo en aquella carpeta, había estudiado a milímetro la organización italiana, pero como el coronel había dicho, había sido imposible recaudar suficiente información para incriminarlo.

Gia no mezclaba la humildad con la hipocresía, sabía de sobra que era la indicada para esto, pero algo en la mirada de su General le decía que había algo más.

—General ¿cuál es la trampa?

—El empleo que solicitan es de niñera de un crio de diez años.

Cerró los ojos maldiciendo. Podía montar y desmontar una boba, como francotiradora en la agencia le besaban los pies, con un arma de cuerpo a cuerpo era mortal y con sus tacones de diez centímetros era letal. Cada agente elite recibía un entrenamiento especial como paquete premium, donde más parecía que te entrenaban para convertirte en la próxima cabeza de algún crimen organizado que para una agencia gubernamental. Y es que llegaron a la conclusión de que a la serpiente se le pelea con otra serpiente. Sin embargo, tratar con niños era algo que no te enseñaban.

Stiletto VendettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora