"THE MURDER OF ME." |⚠ +18| Omegaverse.

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¡Bienvenidos al cuarto arco!

La canción que Akaza pone en la bocina esta enlazada al capítulo por si gustan escucharla a partir de la marca:

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En lo personal, pienso que le da un toque muy bonito a la historia :'), pero si no la escuchan igual no pasa nada.

— × —

«— P-padre... Cómo..., ¿Cómo sigue?, ¿Le duele la cabeza...?

— Ah, Kyojuro, pásame el agua por favor, te juro que siento que me explotara la cabeza, ¿Dónde está Senjuro?

— Está... Está en su h-habitación... Padre... ¿No gusta que lo meta a u-un curso de rehabilitación para dejar el a-alcohol? Cada día está peor que el anterior y Y-yo...

— Déjame en paz»

Kyojuro se recargo en el hombro de Akaza y este paso su brazo por sus hombros para darle un gentil abrazo. De nuevo estaban viendo la misma película.

"El castillo vagabundo."

Por primera vez Akaza estaba mirando el televisor sin dormirse. Sintió como Kyojuro bajaba un poco más su cabeza acurrucándose en su pecho y después recargo su cabeza sobre sus piernas. Soltó una pequeña risa y después empezó a acariciar el cabello rubio del Omega mientras pellizcaba de vez en cuando sus mejillas.

Kyojuro no tuvo reacción alguna como siempre, y desvío la mirada de nuevo al televisor, viendo cómo los protagonistas bailaban con una hermosa melodía de fondo sobre el cielo mismo como si este fuera el suelo.

Una sonrisa melancólica se puso en sus labios y sintió sus ojos humedecerse de nuevo, pero esta vez también desvío la mirada al televisor, mirando también la escena.

No le gustaban las películas si era sincero, su mente siempre divagaba en ellas y jamás prestaba atención, así que de todas las veces que habían visto la película aún no se sabía siquiera los nombres de muchos personajes, si bien sabía uno que otro diálogo, o incluso algunas escenas, lo único que sabía era que una joven que se hizo anciana por una maldición de quién sabe qué cosa convivía con un hombre rubio que al parecer era mago y que ambos se enamoraban, rompiendo así la maldición.

El concepto era raro, si, pero la película era muy linda y emotiva, lo sabía por algunas escenas que miró y realmente le llegaron al corazón. De hecho, después de divagar un rato en algunas escenas, descubrió cuál era el mensaje que la película intentaba trasmitir, y ese era que cada persona tiene el poder de cambiar su propia vida y el mundo que les rodea; aunque hay fuerzas externas que pueden influir en la vida, la verdadera transformación solo puede venir de adentro con ayuda de las personas adecuadas, o bien, en la película, con el amor de tu vida.

Se preguntó si Kyojuro sabía el significado de la película y si era por esta razón que le gustaba tanto.

— ... A-Akaza...

De inmediato bajó su mirada al Omega de nuevo.

— ¿Si? — respondió.

Inevitablemente recordó lo que había pasado después de que Kyojuro le había llamado por su nombre en el hospital.

«Akaza se quedó congelado mirando al Omega, a decir verdad su cerebro aún no procesaba del todo lo ocurrido. Ni siquiera podía pensar con claridad.