One shots MonSam Y Freenbecky

Koi no yokan 4

Nota:
1) acabo de notar que nunca subí esto 👀 mmm...me quedé pegada escribiendo una historia y me perdí en el espacio tiempo.

2) ortografía 👀

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—ellos ya están abajo amor.

—ya voy.

—te ves hermosa.

—bueno, el tiempo que pude ver no me convenció tanto.

—pues parece que no están tan buenos esos ojitos— dijo Becky envolviendo su cuello— yo solo veo al ser más hermoso de todo el universo. Estás preciosa, el blanco te sienta de maravilla, con ese cabello castaño largo, y el brillo labial. ¡DIOS! si no estuvieran tus padres.

—tu no te cansas, eh. Ayer lo hicimos como 4 veces.

—yo no tengo la culpa de que sea tan adictiva.

—deberiamos bajar— dijo Freen acercándose para dejar un beso corto en los labios de Becky.

—esta bien amor.

—te deje un regalo en la mesita.

—¿En qué momento?

—cuando te fuiste a duchar. No es muy grande, pero es con amor.

Becky soltó el cuello de la mujer y busco el sobre, vio unos aritos en forma de oso allí y sonrió.

—me encantan.

—ponlos, tal vez en algun momento vuelva esto y quiero verlo. Ya sabes cómo juega mi vista.

— por supuesto— dijo Becky contenta mientras los ponía.

Bajaron a sentarse en la mesa con el resto de las personas justo después de saludar.

—¿Que tal ha salido todo?— pregunto, su voz sonó agotada y encajaba perfectamente con la expresión en su rostro. Como si no hubiera parado de trabajar ningun día.

Era exacto lo que pasaba, ni el, ni la mamá de freen se había detenido, el tratamiento era caro, y necesitarían el dinero para pagar todo, pese al préstamo y a la ayuda de Becky, que daba sin que Freen supiera porque se había negado rotundamente a aquello.

—tengo que contarles algo.

—¿Hay algo mal?

—al contrario. Pa— dijo Freen buscando la mano de su padre atraves de la mesa— hay momentos en los que logro ver, tiempos cortos, imágenes nitadas, definidas y grandes, en 3 dimensiones. Papá está funcionando, lo hace.

Fue su madre quien la abrazo primero, algo brusco y con torpeza porque no aguanto la emoción, y su padre se unió tras esconder una lágrima. Al contrario de su mujer que no disimulo el llanto, Freen solo acaricio su espalda, contenta, estaba contenta por todo.

La charla se basó gran parte en ello, en el como, el cuando, en qué se sintió, en como había avanzado desde la primera vez, en qué había dicho el médico, en como se sentía saber que podía ser permanente. El resto fue hablar sobre el trabajo de sus padres, y el posible regreso a Tailandia de las chicas.

Aún no terminaba el tratamientos y probablemente quedaba mucho, así que aún no era una posibilidad cercana.

Finalmente sus padres decidieron quedarse en la habitación desocupada los dos días que estarían allí. Fue un fin de semana divertido, pero también agotador y emocionante. Una mezcla, una felicidad muy grande que se convirtió en lágrimas, cuando Freen pudo ver el rostro de su madre tras años de no hacerlo, su piel lucía más arrugada, sus ojeras eran grandes y su rostro lucía cansado, pero aquello no era importante cuando su madre esbozo la sonrisa más grande y más hermosa cuando Freen mencionó “extrañaba tu rostro” y lo siguiente que sintió fue el abrazo con fuerza de su madre. Pudo ver a su padre apenas unos segundos, pero vio las lágrimas, el castaño en sus ojos y el agotamiento físico visible.