Number Seventeen. -Jaden Walton.

- chapter 13 - "algo importante que decirles x2"

Los días transcurrían normal. Iba a la escuela, Katie y Joe venían a mi casa, iba a mis prácticas, etc.

Ya faltaba solo una semana y media para mudarnos y yo todavía no les decía a mis amigos. Pero hoy llegó el día de decirles, no solo a ellos, también a la escuela. Ya que como dije, soy algo popular y reconocida.

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Acababa de llegar de la escuela, estaba libre hoy. Me tomé un baño y me puse una ropa más cómoda para relajarme. Katie y Joe ya venían de camino, ya que los hubiera llamado.

–Tocan la puerta y bajo inmediatamente–.

—Pasen –les dije a mis amigos–.

—¿Qué era lo muy importante que tienes que decirnos, Lex? –pregunta Joe antes de sentarse en el sofá–.

—¿Ya tienes novio y no nos hubieras dicho? –pregunta Katie indignada–.

—¿Qué? No, no.

Solo lo dije de una vez para evitar llorar.

—Nos mudaremos.

En eso mis amigos se me quedan viendo confundidos mientras yo solo miraba a un punto fijo.

—¿De qué estás hablando, Lexie? –pregunta Joe confundido–.

Me llamó "Lexie", Dios.

—Mi madre nos dijo hace 2 semanas que nos mudaremos a Atlanta, Georgia. Saben que su restaurante queda allá, así que es más fácil para ella.

—No, no. Quédate en mi casa, mi madre no tendrá ningún problema –dice Katie–.

—Pero mi madre si. En realidad me puse muy mal con la noticia y me dolía que no podía hacer nada para evitarlo. La decisión está hecha, y no hay nada que pueda hacer –digo con tristeza en el pecho–.

Mis amigos me abrazan. En realidad, los extrañaré. No sé que haré sin ellos, si que estén todo el día en mi casa, que cuando llegue a la escuela ellos me estén esperando en mi casillero y quejarnos de las horas de clase y profesores.

—Me duele mucho esta noticia, Lex. Nunca imaginé que te separarías de nosotros, pero Dios lo quiso así y todo pasa por algo –dice Joe–.

Ya estaba llorando.

—Pero ya, dejemos la pena y la lloradera –dice Katie limpiándose una lágrima–. No estaremos muy lejos. Además, mejor aprovechemos estos días juntos sin darle mente al asunto.

Por eso los extrañaré.

—Tienes razón –sonrío–.

Pasamos el día entero hablando y haciendo muchas cosas juntos, como siempre.

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Ya era el último día de clases. En el club de la gimnasia rítmica de la escuela teníamos un acto para fin de año. Yo era la capitana del equipo de gimnasia, y ese era el día que anunciaría que me iba de la ciudad y nombrar a otra de capitana.

No tuvimos muchas clases, solo nos sacaron a ver muchas presentaciones y a escoger cosas para el año siguiente. Lamentablemente, no podía escogerlas.

Y ahí, estaba toda la escuela en el campo de fútbol, nos tocaba hacer nuestra presentación y resultó todo bien.

—¡Que buen acto de despedida no dieron las del club de gimnasia rítmica hoy! –dice la directora por el micrófono frente a toda la escuela–.

–Todos aplauden–.

—Y ahora, tendremos una palabras de la capitana de este equipo, ¡Lexie Wolsen! –todos aplauden nuevamente–.

–Me paro frente al micrófono, y gracias a Dios no tengo miedo escénico–.

—Gracias a todos, de verdad. Ha sido un gran placer ser capitana de este gran equipo, trabajar y divertirme con todas ellas. Pero en la vida, todo en algún momento llega a su fin. Sea bueno o malo para una persona, o tal vez la cosas no son como quieres pero las tienes que aceptar como pasan.

En ese momento todos se miraron confundidos.

—Lamentablemente, ya no seré capitana, ni perteneceré a este equipo que me ha llenado de alegría.

Las del equipo se miraron confundidas.

—Me iré de la ciudad –y así concluyo–. Gracias por todo el amor que me han dado aquí, nunca los olvidaré, enserio.

Quería llorar, enserio.

—Mi puesto como la capitana del equipo de gimnasia rítmica lo tomará... ¡Jessie Miller!

–Todos aplauden nuevamente–.

—Muchas felicidades, se que manejarás todo bien, serás una buena capitana.

—¡Gracias, Lexie. Te extrañaremos! –dice Jessie–.

En ese momento bajaron todas las de mis equipos de voleibol, básquet y fútbol a abrazarme y ahí todos aplaudieron de nuevo.

Y ahí también veo a Katie y Joe bajar de las gradas y correr hacia a mi. Nos damos un fuerte abrazo después del abrazo con las del equipo.

No creí que fuera tan importante para la escuela, estaba llena de lágrimas.