VIDA DE MI VIDA

CAPITULO 11: TUS MANOS

"Nunca me arrepiento de haberte dado todo de mi"

- ¿Y? ¿Por qué tan feliz?

Luna y Ahara caminaban hacia el instituto mientras conversaban, ella siempre tenían conversaciones diarias, conversaciones de las cuales Iria siempre era un tema del cual hablar.

- A pues como te dije, estuvimos conversando normalmente y le mostré lo que hizo Daniela, entonces me preguntó si nos podíamos ¡casar!

Comentaba Ahara muy emocionada, Iria siempre era un tema interesante del cual hablar, de hecho, la presumía bastante, tal vez eso era malo o bueno, pero amaba presumirla ya Luna tampoco le molestaba escuchar a cerca del joven que enamoró a su amiga.

- ¿Y qué vas a hacer? - Preguntó Luna mientras notaba que a su paso habían muchas galerías comerciales de joyería, era como si el destino expresara que comprar un par de anillos era una buena idea después de todo.

- Ah pues...de hecho esperaba regalarle un anillo...lo pensé desde entonces. Quería hacerle uno de papel como en internet pero al final decidió por algo real.

- Mmh...pero ¿Cuánto tiempo llevan?

- Creo que dos meses ya...

- ¿No crees que es muy pronto?

Al instante escuchar, Ahara comenzó a reír, y su risa era tan contagiosa que Luna también comenzó a reír, duraron así un momento hasta que ambas se callaron por completo

- Pero Luna, esto no es matrimonio, solo es un regalo, un detalle que me encantaría darle a Iria.

- Ah.... ¿Y si se lo especifica?

- Sería extraño, Luna, solo ayúdame a buscar un buen anillo para obsequiárselo.

Luna solo asintió con la cabeza y entraron a la siguiente galería que tenía muchos artículos adorables. Fueron hasta la sección de joyería y se dieron cuenta que los anillos se medían en tallas, de hecho, Ahara nunca había pensado en eso ¿Qué talla era la mano de Iria? Ni siquiera sabia que talla era ella misma.

- Ahora... ¿Sabes cuál es su talla? - Preguntó Luna

- Ni siquiera sé cuál es la mía, pero si puedo imaginar cómo son sus manos, sus manos son más pequeñas que las mías, creo...

- Pues...aquí hay talla 18, 20, 19... mídelas en tus manos.

Ahara probaba cada uno de los anillos hasta que vio unos que le llamaron la atencion.

- Mira, este es sencillo, elegante y bonito

Luna miró los anillos en la mano de Ahara y asintió.

- Si, te quedan bien, el diseño hace parecer que los anillos se complementan. Ahora elige una talla más pequeña para él.

Había llegado al instituto minutos después, ahí estaba otra de las amigas de Ahara.

- Llegaron casi tarde, ¿Qué pasó? - cuestionó con esa voz delicada que tenía.

- Ah...nada, Ahara quería comprarle algo a Iria, ya sabes.

- ¡Zulay! Mira lo que compré ¿Tú crees que le quede? - Ahara mostro ambos anillos en su mano

- ¡Pero que bonitos! A mí me gusta, yo creo que le quedará súper bien en su manita.

Las clases habían concurrido con tranquilidad, sin embargo Ahara no sabía exactamente cómo iba a obsequiarle el anillo, ella se imaginaba una escena romántica, una parecía a una propuesta de matrimonio, pero obviamente no lo haría de esa manera.