🏡Hope City🏣

106 11 2
                                    

Los grandes guardianes del mundo se hicieron presentes en una especie de reunión de emergencia, para mi fue como una oportunidad única para salvarme. Nunca me esperaría que ellos se apiadaran de un demonio...

El camino hasta el poblado fue fugaz gracias a la pequeña siesta que tomé en el auto, ni siquiera sentí cuando me llevaron dormido hasta un lugar lleno de hombres armados y algunos otros con armaduras peculiares.

Abrí los ojos poco a poco recargado en el hombro de la mujer del hospital que caminaba firme por un pasillo. Una puerta se abrió dejando ver a varias personas dentro, pero de inmediato un sentimiento de peligro y amenaza me recorrió la espalda como si un hielo se deslizara hasta la espina.

-Madelein, no es buen momento -anunció un hombre que portaba un traje verde con medallas en uno de sus lados.

El hombre que se dirigió a la mujer era el más inofensivo de los ahí presentes, pero los otros tres, ellos de verdad eran el peligro. Madelein seguramente no tenía ni idea de quiénes eran, pues con una voz engreída y exigente solicitó de inmediato que fueran a buscar a mi amigo.

-Sabían que un par de bebés estaban a las afueras de la ciudad solos y sin quien viera por ellos, y no han echo nada -comentó la mujer directo al hombre de traje negro.

Aquel sujeto de piel blanca, ojos verdes y cabellera plateada se acercó intimidante. No iba a permitir que le pusiera una mano encima, ella no era una mala mujer o bueno no al menos en lo poco que la conocía. Me impulse de sus manos para que me bajara y casi cayéndose toque el suelo quedando delante del hombre.

-Tranquila pequeña fiera -increpó el hombre de traje negro como la oscuridad-, tu amiguito esta bien, lo encontramos y lo tragimos.

Me quedé confundido solo me le quedé mirando y sin creerle mucho analice a cada uno de los ahí reunidos. Eran los guardianes a quienes tenía frente mi y la mujer de cabello rojizo, se incorporó para ofrecerle a Madelein que fuera a ver al otro bebe, ella aceptó pero quería que fuera consigo. Sin embargo el otro hombre de traje y ojos rojos intervino anunciando que debían hablar primero conmigo, pues ellos tendrían que dar su permiso para la adopción.

Madelein muy para mi sorpresa enfrentó a los seres delante suyo exigiendo que fuera con ella o que estuviera presente; ¿porque le importaba tanto?

Le pedí que me dejara a solas con ellos un momento por favor y fuera a ver a Samu, tenía que fijarse si estaba bien. A regañadientes aceptó y salió dejándome con aquellas bestias.

-Muy bien, ahora digan ¿cual es su intención? -confronte a los tres cruzados de brazos y dejando que mis ojos se cambiarán a un color verde exponiendo mi poder.

-Deberías cuidar tus palabras, tu destino fue más que salvado por tu linda carita -se acercó la mujer a tocar mi cabello.

Quería dejar salir mi verdadera forma para enfrentarlos como se debía, pero si lo hacía era claro que destruiríamos todo.

-Nada de lindo, hablen o correrá sangre -los mire a cada uno sin confiarme.

-Ey, no vinimos a pelear -intervino el hombre de cabello blanco-, tienes que estar agradecido de que acordaramos permitirte vivir- se me acercó parándose frente a mí recargado en un bastón que tenía una calavera en la punta donde descansaban sus manos-, pero no tientes nuestra buena fe o tendremos que tomar...medias.

La sonrisa que se formó en su cara fue bastante tétrica y debo admitir que me sorprendió ver como su boca creció un par de centímetros hacia sus mejillas. Su aroma a cenizas era bastante fuerte.

-Debería irse a "Big Wolf" -habló por fin el otro hombre de cabello oscuro y ojos cerrados que en todo ese momento se había mantenido en una esquina escuchando.

Lucy "Destino"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora