Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
LAS RESPIRACIONES AGITADAS DE DWIGHT se lograban escuchar intensamente mientras que hacía alguna clase de ejercicio sentado en una pelota de yoga.
— Debes conseguirte una de estas. — Dijo Dwight a Jim al notar que el mismo lo estaba mirando con mala cara.
— No, gracias.
— ¿Al menos sabes lo que es? — El de anteojos no recibió respuesta. — Es una pelota de esferodinamia y ha cambiado mi vida por completo.
—¿Cómo? — Se unió Mel a la conversación.
— Olvídate de todo lo que creías saber sobre ejercicios abdominales.
— Hecho. — Dijo Mel rápidamente.
— Este ejercicio abdominal esta diseñado específicamente para fortalecer tu eje. — Empezó a moverse de manera más repetitiva sobre la pelota y terminó tirando unos útiles. — Perdón.
— Está bien. — Habló Jim levantando lo que se había caído con cansancio.
— Numerosos beneficios para la salud, fortalece la espalda, mejora tu rendimiento en los deportes y disfrutas más el sexo. — Siguió explicando el granjero.
— Tú no tienes sexo. — Negó Jim.
— Pregúntale a Carter.
Jim miró a la vendedora y alzó las cejas, ella solo sacudió la cabeza ligeramente para decir que no y desmentirlo.
— Sabía que te iba a interesar lo que dije y estuviste distraído por eso, no te pasaría si te conseguirías una de estas, te ayuda en la concentración, constancia y en los reflejos.
— Bueno, ¿Cúanto cuesta? — Jim dirigió nuevamente su mirada a Dwight.
— Solo 25 dólares.
— Vaya. — El castaño hizo una pausa y luego salió de su asiento sujetando una tijera en sus manos. — Bueno. — Dió unos pasos a la dirección de Schrute y le reventó la pelota con el filo de las tijeras, haciendo que se caiga inmediatamente al suelo.