Esto sucedio antes de que muriera. un dia recien me habia mudado a mi nuevo hogar donde viviria solo. necesitaba un empleo asi que conseguir obtener una entrevista en la universidad llamada: Arnoldo Filis. ahora mismo estoy en la oficina del director, este mismo esta entrevistandome para saber si cumplia con los requisitos de ser profersor en medicina.
-Mmm...Nada mal. ¿Asi que fuiste un enfermero?-
Dijo el director mientras revisaba mi curriculum. yo un poco nervioso le respondi...
-Asi es. cuando era joven estudie medicina para ser doctor, pero luego me ofrecieron una oportunidad en la enfermeria. -
-Mmm...es un trabajo importante. ¿Por que la dejaste?-
-Pues...Mis padres fallecieron. mi hermano y yo heredamos la casa, teniamos nuestras diferencia asi que me muder en un apartamento un poco cerca de aqui.-
-Mmm...¿Y tienes algo de experiencia en enseñar?-
-Un poco. cuando era enfermero habian llegados unos estudiantes de una universidad a hospital, ese dia yo fui guia de un pequeño grupo a quiénes enseñe más o menos las funciones y la necesidad de ciertos útiles.-
-Mmm...¿Te gusta el chocolate?-
-¿Eh?...si, ¿A quien no?-
("¿Y esa pregunta que?")
- Eres perfecto. Estas contratado, empiezas el lunes.-
- Gracias.-
Habíamos acordados con estrechar nuestras manos. Después de la entrevista me fui a mi casa, era de noche. Durante el camino vi una tienda que tenía un descuento de 60% en pescado, aproveche la oportunidad de comprar una bolsa.
- Esta noche voy a comer bien.-
Me dije a mismo mientras veía la bolsa de pescado en mi mano. Creo que debería dejar de hablar solo.
-*¡¡¡MIAUUUU!!!*-
- ¿Mmm?-
Escuche un maullido fuerte a mi lado. Cuando volteo a ver hacia mi izquierda resultó ser un gato de pelaje blanco que no paraba de gruñir y maullar a una pared. Hasta creo que se le veía agotada como si hubiera corrido un maratón.
-Jeje, es solo un gato.-*dije*
El felino se percato de mi presencia y me miró con una expresión de desconfianza. Estaba en una posición gatuna de amenaza con sus ojos azules como si fueran de diamante sin dejar de verme.
- Tranquila, no te hare daño.-
La gata dejo su postura y se acerco hacia mí, pero a llegar lo único que hizo fue olfatear la bolsa de pescado que llevaba conmigo.
-¡Miau!-
-¿Eh?. . . ¿Quieres?-
Metí mi mano en la bolsa para sacar un pescado que después había dejado en el suelo frente del gato. Este mismo lo olió y empezó a comer como si nunca hubiera comido en su vida.
-Eres muy linda.-
Me había agachado para levantar unas de mis manos hacia el felino, la acaricie mientras se comía el pescado que le di.
-Bien. Me tengo que ir.-
Me levante y reanude mi camino hacia mi casa, volteo mi mirada donde estaba el gato, y este mismo me estaba siguiendo.
-¿Quieres venir conmigo?-
El gato traía consigo la mitad del pescado en la boca, se sentó a mi lado mientras me miraba con esos ojos diamante.
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Mi segunda vida como Raissa
FantasySiempre me he estado preguntando a mi mismo, ¿Que me sucedería si muero? Desde hace mucho la humanidad creían que a morir iríamos a cielo o infierno dependiendo de nuestra acciones desde que nacemos. Otros creen que dejaríamos de existir o terminarí...