①⑤

141 16 1
                                    

Felix y Hyunjin se encontraban en el parque, cerca de la fuente, cada uno con un helado en su mano. Después de que el museo cerrara, ambos decidieron comer algo mientras veían el atardecer, y optaron por unos helados. Era la primera vez que Hyunjin comía helados de un puesto corriente, la mayoría de postres que probaba eran preparados por los más excepcionales Cheff's de toda la nación, pero quién diría que un helado de afuera sería incluso más delicioso.

—Cuéntame de ti, siento que no te conozco —Felix interrumpió el silencio, mirando a Hyunjin mientras lamía las gotas de helado en su cono.

—Pero si toda mi vida está en internet.

—Debe haber algo que no esté en internet, vamos, confía en mí —Insistió —¿Serás rey por obligación?

—¿Cómo en las historias clichés? —Bromeó el príncipe —No, este ha sido mi sueño desde muy pequeño, no hay otra cosa que quiera hacer. Deseo gobernar y ser el rey benevolente que todos esperan que sea.

—Es una gran responsabilidad.

—Estoy dispuesto a afrontar cualquier adversidad —Sonrió Hyunjin. Felix supo que no había mentira en sus palabras, realmente deseaba ser un rey —Aunque hay algo que me está molestando últimamente.

—¿El qué?

—Mi padre quiere que ascienda al trono con una esposa.

El pecho de Felix por alguna razón se apretó, pero no le dió importancia y aclaró su garganta antes de volver a hablar —Entonces, ¿Estás en un matrimonio arreglado?

—No, mi madre no permitió que pasara eso. Mi padre solo organiza todos los fines de semana citas a ciegas con mujeres prácticamente perfectas. Mujeres de clase alta, guapas y con buenos modales. —Suspiró Hyunjin rascando su nuca —Pero sin importar cuántas mujeres conozca, no puedo enamorarme y eso me frustra porque odio asistir a esas citas y que mi padre me agobie con eso.

—Mmmm, ¿No has pensado en que tal vez no te gustan las mujeres? Es decir, no aceptaste ninguna de las chicas que te presentaron pero no tuviste problema en acostarte con un plebeyo a quién conoces de hace unos días —Declaró Felix, terminando de comerse su helado y cruzándose de brazos. Hyunjin lo miró, tenía un muy buen punto, pero no haría mucho con eso.

—Aún si tienes razón, no puedo hacer nada con eso, mi padre jamás aceptaría algo así. No puedo permitirme aceptar mi gusto hacia los hombres, eso no me haría perfecto.

—Hyunjin —Felix tomó su rostro y lo obligó a mirarlo —Nadie es perfecto. No importa cuánto te esfuerces en ser la perfección pura, nunca lo serás. Saliste de tu palacio para ir a una fiesta de plebeyos y te acostaste con uno de ellos, eres todo menos perfecto y eso no está mal.

—No lo entiendes, el reino no tendrá confianza en mi si...

—¿Y a quien demonios le importa si te tienen confianza o no? Eres su futuro rey, nada puede cambiar eso, ellos se tendrán que acostumbrar. Hyunjin, tus gustos no te hacen mala persona.

Nuevamente esas palabras, las mismas que le había dicho Minho en el auto. Hyunjin asintió lentamente y bajó la cabeza, Felix volvió a su postura original, pero con una mano en el hombro ajeno, acariciando suavemente.

—Gracias —Terminó por decir Hyunjin.

—No hay de qué —Respondió Felix —Es un alivio que no estés en un matrimonio arreglado y puedas al menos elegir quien será tu pareja. Tu madre tomó una buena decisión.

—Es porque ella sabe que se siente estar en esa situación.

—¿Los reyes están en un matrimonio arreglado?

𝑬𝒍 𝒄𝒐𝒓𝒂𝒛𝒐́𝒏 𝒅𝒆𝒍 𝒑𝒓𝒊𝒏𝒄𝒊𝒑𝒆 ♕︎ { 𝑯𝒀𝑼𝑵𝑳𝑰𝑿 }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora