𝑬𝒍 𝒄𝒐𝒓𝒂𝒛𝒐́𝒏 𝒅𝒆𝒍 𝒑𝒓𝒊𝒏𝒄𝒊𝒑𝒆 ♕︎ { 𝑯𝒀𝑼𝑵𝑳𝑰𝑿 }

②④

Apenas llegaron a casa del rubio, comenzaron a devorarse como animales. Hyunjin rodeaba la cintura del menor con sus brazos mientras que ambos hacían un lamentable intento de caminar hacia la cama. Aún con sus labios unidos, Felix logró empujar al príncipe en su cama y colocarse encima, mordiendo y chupando su belfo. Hyunjin se Inclinó hacia adelante y logró quedar sentado con Felix en su regazo.

—Espera... Lix... —Jadeó Hyunjin entre sus labios, sintiendo su pantalón vaquero ajustarse un poco más por su creciente erección —Debo decirte algo...

—Después... —Susurró Felix, comenzando a frotarse contra el más alto, haciendo fricción entre sus miembros con la ropa puesta —Fóllame duro primero...

—Te vas a desmayar y no te voy a poder decir —Dijo el príncipe, deleitándose con los dulces gemidos que Felix comenzaba a soltar.

—Entonces... dímelo después de la primera ronda —Felix movió sus caderas más rápido, haciendo al mayor jadear.

—Pero...

—Por favor, por favor Alteza —Colocó su voz más grave a propósito, sabiendo como se ponía Hyunjin al escucharlo hablar de esa forma —Te he extrañado tanto, necesito tu polla dentro de mi... Por favor, se lo ruego...

Eso era jugar sucio, Felix sabía las debilidades de Hyunjin y una de ellas era oírlo rogar. Se olvidó por completo del tema importante y bajó a Felix de su regazo.

—Culo arriba, Lee —Soltó con una voz y mirada cargada de deseo, fue inevitable para Felix no derretirse y hacer lo pedido, colocando sus rodillas en el colchón y bajando su pecho, mostrando su pomposo trasero hacia Hyunjin.

El príncipe mordió su abultado belfo mientras disfrutaba de tener al menor a su disposición. Pensó en poner a prueba algo que había visto en una película y se quitó el cinturón del pantalón.

Llevó las dos muñecas del rubio hacia atrás y tal y como había visto, las junto con el cinturón, asegurándose de que no pudiera moverlas. Esto tomó por sopresa a Felix, eran contadas las veces que se dejó someter de esa forma y porque realmente no le llamaba la atención. Sin embargo, que Hyunjin lo haga era muchísimo mejor y producía más exitacion en el, tanto que con una sonrisa ladina comenzó a mover sus caderas hacía atrás, chocando con el bulto escondido de Hyunjin para provocarlo.

—Quieto —El mayor detuvo sus movimientos, tomándolo de las caderas para bajar sus pantalones y tirarlos por ahí. Recordó la forma más fácil de hacer que Felix se quedara quieto, así que dió una nalgada en una de sus nalgas, haciéndolo jadear —Quieto.

—Haah... Alteza, me has sorprendido como no tienes idea —Dijo el rubio después de soltar un jadeo —Por favor sigue, muero de ganas de saber tu próximo movimiento.

—Ya que insistes — el vestuario de Hyunjin llevaba un corbata, así que se la quitó y la colocó al rededor de los ojos ajenos, haciendo que este jadeara de sorpresa al ser privado de la vista —Dicen que de esta forma te vuelves más sensible.

—Ha... Habría que averiguarlo —Era la primera vez que alguien lo privaba de la vista en el sexo, mentiría si dijera que no le estaba gustando.

Hyunjin sonrió y comenzó a besar el cuerpo de Felix, tomándose su tiempo para no dejar ni un rincón sin besar. Tenía razón, el cuerpo de Felix se estremecía con el más mínimo tacto, esto lo motivó a seguir. Bajó con lentitud hasta llegar a sus glúteos, besándolos y mordiendolos, lamiendo aquella marca roja que había dejado su mano. Miró por el borde de su ojo la rosada entrada ajena y decidió dejarse llevar, paseando lentamente su lengua por ahí, provocando que Felix inconscientemente alejara su cuerpo por la sorpresa.