O41: Vivir

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ㅡHola, noona, ¿ya te vas? ㅡpreguntó repentinamente, a lo que la mayor le miró por unos segundos y asintió con sencillezㅡ ¿Pasa algo? Luces... Molesta.

ㅡNo es nada, tranquilo ㅡmurmuró, tallando sus ojos con cansancioㅡ Sólo, que últimamente no he dormido bien, es todo. ¿Y tú? Ayer no viniste a clases.

ㅡOh, eso. Fue una gripe, me dolía el pecho, pero ya estoy mejor ㅡcaminó a su lado, ambos en dirección a los casillerosㅡ ¿Tienes insomnio? Aunque el té también podría ayudarte a conciliar mejor el sueño.

ㅡNo te preocupes, si tengo eso pero ya me he adaptado a vivir con él, no puedo tomar muchas pastillas porque me puede dar una sobredosis. Por ahora lo importante es que te mejores de eso, al menos lo es para mí.

ㅡPero a mí también me interesa que te sientas bien, por eso te recomiendo eso. Aunque no sé muy bien, nunca he tenido problemas para dormir, sólo cuando duermo por las tardes en la noche me la paso dando vueltas en mi cama.

No pudo evitar exhalar una pequeña risa, haciendo sonreír al menor.

Había estado evitandolo todo el día.

««

ㅡ¿De qué demonios estás hablando? ㅡsusurró, mirándole fijamenteㅡ Yong, esto es serio, y si es una broma te aseguro que no me causa una sola pizca de gracia. Te voy a mojar con agua bendita si no me dices que estás jugando.

ㅡOye, ¿me ves cara de mentiroso? Te aseguro que lo ví. Repito, él intentaba alejarse, pero la zanahoria aún así seguía insistiendo.

ㅡA ver, a ver. Vuelve a iniciar, estoy bastante perdida.

Bang jadeó con cansancio, columpiandose en el aire con suavidad.

ㅡEsos dos estaban hablando en la biblioteca, creo que sobre citas y esas cosas raras de humanos. Ella dijo algo así como "sé que te sigo gustando", se acercó a él y le embarró parte de su labial en el cuello.

El sonido de un lapicero rompiéndose resonó, a lo que YongHan calló y le miró con serenidad. La mirada de JooEun se oscureció, y una de las venas en su mandíbula salió ligeramente.

ㅡTranquila, tigre. Él la mandó a su casa pero la perra seguía y seguía, hasta que tu novio le gritó "¡¿Qué no ves que ya estoy en una relación?!" y se fue. Tuve que hacerme el invisible para que no notara que estaba de chismoso.

ㅡEntonces... ¿Ella no le besó el cuello?

ㅡPor supuesto que no, ¿no me estás escuchando? Si hubiera hecho eso probablemente la hubiese golpeado, o al menos yo la haría. Sus formas de coqueteo son... Extrañas.

ㅡPuedes seguir pensando en coito si quieres, pero enserio... Es una enferma.

ㅡSí, desgraciadamente me tocará verla en el purgatorio una vez se muera o la maten. Ah, que lamentable, ¿no? Hasta uno en el Infierno tiene problemas, fantástico.

»»

¿Era estúpido? Sí.

Probablemente aprendería que no era bueno sólo alejarse sin dar explicaciones. Cómo cierta persona que conocía.

ㅡPero en fin. Te veo mañana.

ㅡ¿Estás molesta conmigo?

La pregunta la dejó atónita, se detuvo en seco a la puerta del edificio; JaeHoon le miró con confusión y culpabilidad, por lo que pronto se sintió en pánico y negó rápidamente con cabeza y manos.

ㅡNo, no es eso, no es nada. Es por eso del sueño, no estoy lo suficientemente descansada y no me siento con muchos ánimos, perdón si fui grosera.

ㅡ¿Hice algo malo? ㅡse acercó, alcanzando lo suficientemente para poder sentir el golpe de la respiración ajena contra su pecho.

CLÍO ONE: ILLUSIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora