Capítulo 70: La gran pelea (Parte 4)

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Moviéndome por las calles de Orario tenía a Echidna, Ryner y William conmigo.

Después del desayuno, Kaguya se fue para regresar a casa.

Mientras lo hacía, decidí irme con el grupo de patrulla de hoy.

Mientras que los demás permanecieron en la Casa del Búho con Athena. No sólo para hacer un poco de inventario, sino también para asegurarnos de que Athena y nuestra casa no quedaran desprotegidas. Ya que sé que esos bastardos de Evilus no están por encima de usar una táctica como esa.

Los cuatro observamos nuestro entorno mientras caminábamos, al hacerlo notamos que casi no había vendedores instalados en las calles, y los que portaban armas improvisadas con ellos. Pareciendo listo para saltar en cualquier momento.

"Hombre, la tensión es tan espesa que apenas puedo respirar". -murmuró William.

"Tengo que estar de acuerdo contigo en eso." Yo dije.

"Yo también." añadió Ryner.

"Lo mismo." Dijo Equidna. Una expresión seria en su rostro.

Así de mal están las cosas, ya que normalmente nuestra bruja codiciosa residente tiene una sonrisa traviesa o juguetona.

Pero ahora mismo no sonríe en absoluto.

Lo que en realidad la hace aún más aterradora de lo habitual.

Mientras continuábamos nuestra patrulla, Echidna habló de repente.

"¡Allí!" Gritó, señalando a Gloom hacia un aliado ubicado a nuestra izquierda.

En el momento en que habló, el resto de nosotros volvimos la cabeza en esa dirección.

Inmediatamente después de hacerlo, vimos una figura envuelta en una capa que regresaba al aliado después de que acababan de dar un paso fuera de él.

"¡Agh!"

Luego, un momento después, escuchamos un grito de dolor y la sangre cayó al suelo.

Al ver esto, no era necesario decir nada.

Avanzamos hacia el aliado sin perder tiempo.

Al llegar en un momento vimos a tres hombres grandes y corpulentos trabajando para atar una figura envuelta en una capa. Que lucha con todas sus fuerzas por escapar.

"¡Deja de luchar, perra!" Uno de los hombres gritó.

Luego golpeó con el puño la cara de la figura encapuchada, haciendo volar gotas de sangre.

"Oye, ¿qué diablos crees que estás haciendo?" Les pregunté a los hombres con voz fría. Liberando intención asesina en su dirección mientras lo hacía.

En el momento en que sintieron mi presencia, todos se congelaron. Luego volvieron la cabeza en nuestra dirección.

Uno de ellos se movió para hablar, pero antes de que pudiera, levanté la palma de mi mano izquierda.

"Ah, no hay necesidad de dar explicaciones. Entiendo la situación perfectamente. William." Yo dije.

Tan pronto como lo hice, el arquero residencial disparó las tres flechas que había metido en su arco como los hombres, golpeándolas a todas en puntos vitales.

Ignorando sus gritos de dolor, corrí hacia adelante y usé el lado contundente de Vortex Vanquisher para noquearlos a todos en un instante.

Una vez que lo hice, me concentré en la figura encapuchada que habían estado atacando.

Danmachi: El ascenso de la murallaWhere stories live. Discover now