Semana 12

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Narra Alexis

Luca intento hackear la ipp de donde había recibido el mensaje, pero no pudo, al parecer esa red estaba protegida, aunque si logro entrar al correo de B&K, pero todo esfuerzo fue inútil ya que no encontramos tal publicación, la bandeja de B&K estaba limpio, estaba claro que la persona que había hecho tal cosa no era parte del equipo de B&K o era una persona que se dedicaba a lo mismo que Luca

—¡Que mierda es esto! —dijo Luca y aventó su computadora.

—Nadie me había podido ganar, pero al parecer es alguien que me conoce o al menos sabe como ataco ya que pusieron  llaves de seguridad por todos lados.—sé levantó de la silla y camino de un lado a otro, la frustración era algo que se reflejaba a simple vista.  Camie a su lado.

—Tranquilo Luca, sabía que ésto iba a pasar algún día, Ethan me lo dijo y estoy lista para que pase lo que tenga que pasar, es momento de enterrar a Alexis y que salga mi verdadero yo. —dije y le dedique una leve sonrisa, aunque la verdad era que me estaba muriendo de miedo.

Di la vuelta y comencé a caminar a la salida, quería estar sola, necesitaba pensar en que carajos iba a hacer cuando la  bomba explotara al día siguiente, necesitaba pensar en que decir cuando el mundo se enterara de quienes habían sido mis clientes ya que estaba segura de que cuando saliera esa lista a la luz me metería en muchos problemas ya que estaba a punto de incumplir una parte importante de mis contratos, de esa manera mis clientes iban a poder demandarme y no iba a bastar el pedir una disculpa ya que la mayoría de mis clientes eran personas muy poderosas, gente que no estaba dispuesta a perder ni a ser desprestigiada.

—Alexis. —escuche que dijeron mi nombre y al voltear me di cuenta de que estaba en el estacionamiento.

—¿Alina? —dije al reconocer la voz ya que sé encontraba escondida entre las sombras. Al ver mi reacción salió y corrió abrazarme.

— Perdón. —dijo y agachó la cabeza.

—No tuve otra opción, eras tú o Dante y la verdad es que no podía destruir a Dante. — escuchaba con atención cada palabra que decía, pero me era bastante inútil entender algo.

—¿Me puedes decir que está pasando?  —dije a lo que ella negó con la cabeza y salió corriendo.

Suspiré pesado y tome mi celular creía saber el motivo de su reacción, sólo esperaba que eso fuera sólo un mal entendido.

Intente marcar a Dante, pero no daba si quiera tono su celular, suspiré pesado y camine hasta donde estaba mi auto. Dante no vivía muy lejos de mi, así que podría visitarlo sin ningún problema.

Cuando estuve a punto de arrancar el auto mi celular comenzó a sonar. Era un número desconocido.

—Alexis, fue Alina, ella era una infiltrada. —escuche decir a Ethan razón por la cuál me quedé en silencio.

—¿Sigues ahí? —dijo a lo que finalmente respondí.

—¿Pero como? —se escucho un suspiro del otro lado de la línea.

—Alina es corresponsal de B&K fue enviada para sacar información de Dante, pero por alguna razón que aún desconocemos decidió mejor contar tú historia. —suspire pesado y colgué el teléfono.

Si yo me encontraba confundida, no podría imaginar cómo es que se sentía Dante, quién realmente confiaba en ella, para él aunque no lo dijera Alina era una persona muy importante.

Ahora más que nunca necesitaba encontrarlo, necesitaba saber cómo estaba mi mejor amigo, ya que Dante se había convertido en eso.

Me coloqué el cinturón de seguridad y salí del estacionamiento.

Después de quince minutos al volante finalmente llegué al edificio de Dante baje lo más rápido que pude y camine por el hobby, su apartamento estaba en el tercer piso casi al final del pasillo.

Lo sabía a la perfección ya que muchas veces Dante fue quien estuvo conmigo cuando terminaba un contrato. Ya que debía cambiar de casa y el proceso no era tan fácil como parecía, así que en lo que eso ocurría Dante me daba asiló, según él así era mucho más seguro para mí.

Es por eso que imaginarlo en una fea situación me partía el alma, Dante era una persona maravillosa y no merecía que le pasará nada malo.

El elevador se detuvo y al caminar por el pasillo lo vi. No tuve siquiera que acercarme tanto para saber que era quien estaba tocando la puerta de enfrente.

—Dante. —grite, pero el no respondió siguió tocando la puerta.

—¡Abreme! Da la cara, ¡Cobarde! —dijo y sé tiro al suelo, el estado en el que sé encontraba era terrible. Me partió el corazón verlo de esa manera ya que jamás lo había visto así.

—Ella es una traidora. —dijo mientras le daba un sorbo a una botella. Suspiré y negué con la cabeza.

—Aún no sabemos que paso. Debes—  Dante asintió. Sin dejarme continuar.

—Se vendió Alex, sé vendió por un puto departamento y un auto, se vendió por un maldito puesto, eso valió más que todo. —dijo sollozando. Y no supe que contestar simplemente me senté junto a él, no quería que siguiera sufriendo y sabía que si intentaba hablar con él sería peor, así que solamente permanecí a su lado.

Después de un rato de estar sentados y cuando Dante finalmente saco todo lo que tenía que sacar. Tomó su celular he hizo una llamada.

—Prepara la demanda para Alina, ella debe pagar por lo que hizo. —
después sé intento levantar, pero resbaló, así que me lentamente y lo ayude.

—Alex, yo. —le dedique una sonrisa y negué con la cabeza.

—No importa, podremos con eso, tú siempre has podido resolver todo. —dije ya que era verdad, Dante era el mejor abogado que había en está parte del mundo y lo había demostrado muchas veces, había ganado casos como el de Dimitri Hughes o el de Nathan Volkovs él, así que sabía que íbamos a poder resolver lo mío. No respondió simplemente bajo la mirada.

—Pero sigue siendo mi culpa, no debí dejarla entrar, debí investigar más, pero malditasea, me deje llevar por las emociones, por la adrenalina que sentía al verla y les fallé, sobre todo a ti.

Prometo que jamás volverá a pasar algo así, me encargaré de que pague por sus errores. Lo prometo. —sus palabras tera bastante fuertes y sabía lo que le dolía decirlas, pero a pesar de que había bebido estaba segura de que lo decía de verdad.

Y eso me preocupaba bastante al mismo tiempo que me tranquilizaba. Caminamos a su departamento y al llegar se acostó sobre el sillón.

—Descansa Alex, mañana será un día muy largo. —dijo y cerro los ojos.

Nota:

¡Hola!

Muy buenas tardes queridos lectores, espero no me odien por actualizar hasta ahora, pero juro que he tenido unos meses super locos, llenos de trabajo y cosas que hacer, espero y me entiendan.

También espero que les gustará esté capítulo ☺️

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⏰ Last updated: Mar 02 ⏰

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Una esposa para Leo Where stories live. Discover now