Gabriel, Uriel y Muriel abrazaban todos al mismo tiempo a Aziraphale, todos muy emocionados por el cumpleaños de su amigo, los tres sabían que era lo que Gabriel tenía planeado, menos el cumpleañero.
—Gracias chicos, jamás me habían felicitando tantas personas al mismo tiempo.- Aziraphale dejo salir una pequeña carcajada dejándose apretar por ese abrazo.
—Mas te vale irte acostumbrando.- Uriel sonreía mientras sacudía el cabello de Aziraphale, era raro verla sonreír, pero no desagradable, y para todos era curioso que Aziraphale se dejará crecer el cabello, por lo general siempre estaba perfectamente acomodado, pero desde que su vida se torno más entretenida dejo de ser tan derecho y solo seguir su corazón.
A lo lejos un hombre de cabello rojo que solo iba pasando por casualidad, miraba con atención sin miedo a ser descubierto, se encontraba muy lejos para que los muchachos lo alcanzarán a ver, sin embargo el si podía verlos y escucharlos.
"¿Es el cumpleaños de Aziraphale?"
Crowley se quedó muy sorprendido de saber que ese día es el cumpleaños de Aziraphale, ¿Podría hacer algo? Es decir, ¿Sería prudente felicitarlo? Tal vez no, sería mejor quedarse callado, pero muy en lo profundo espera que Aziraphale pasará un muy feliz cumpleaños.
Ya estaba en su aula para dar su primera clase del día, justamente al grupo del que pertenecía Aziraphale, vio entrara a todos sus alumnos entre ellos los cuatro muchachos que ya había visto anteriormente, sin prestarles más atención escribió en el pizarrón.
—¿Alguien puede decirme que día es hoy?- Crowley pregunto a sus alumnos, y noto que alguien levanto la mano inquieto- Dime Gabriel.- No le agradaba mucho el muchacho.
—Es el cumpleaños de Aziraphale, señor.- Comenzaron los gritos de felicitaciones y aplausos para Aziraphale, y este solo estaba rojo cual tomate en su asiento asintiendo con la cabeza de agradecimiento y vergüenza.
"Maldito seas Gabriel" pensó.
—¡Silencio!.- El fuerte grito del profesor hizo que todo el salón callara de inmediato, se levantó y se sentó en una esquina del escritorio haciendo que luciera amenazante para todos y sexy para Aziraphale.
Su mirada viajo por todo el salón hasta llegar a Azira, lo miro fijamente y le dijo con voz grave:
—Ven aquí, Aziraphale.-
El pobre muchacho tembló como gelatina mientras se levantaba, y Gabriel a lado de el comenzaba a arrepentirse de la pequeña maldad que había hecho.
Una vez que Aziraphale ya estaba frente a frente con Crowley, este extendió la mano y le dió el gis, Aziraphale lo tomo confundido.
—Feliz Cumpleaños, Aziraphale.- Su mirada fija en Aziraphale solo hacía que el muchacho se pudiera más nervioso.
—G-Gracias señor.- Se dió vuelta he intentó irse a su lugar, pero la voz del profesor lo detuvo.
—¿A dónde vas?-
—A mi lugar, p-para sentarme.- Dijo nervioso
—Si, ya se para que están los asientos, el gis no era tu regalo de cumpleaños, la ecuación escrita en el pizarrón lo es.- Señalo al pizarrón atrás de el, y un suspiro salió de sus labios, los demás atrás de ellos reían por lo bajo.
—A-ah, lo siento.- Tan rápido cómo pudo resolvió la ecuación y miro a Crowley esperando su aprobación, cómo siempre Crowley fingió duda, pero al final sabía que estaba bien.
—Antes de que se siente, ¿Podría responder a la pregunta que hice hace un rato?- Tomo una hoja de su escritorio y espero la respuesta de Azira.
—Si, hoy nos entrega nuestras calificaciones.- Sus manos nerviosas jugando con su suéter.
—Exacto, estas son las suyas.- extendió la hoja que tenía en mano y se la entrego a Aziraphale.
Azira miro rápido la hoja, una "A+" como siempre.
—Gracias profesor.- Volvió a su lugar y respiro ondo para que se le pasará el susto.
—Para todos los demás, los iré nombrando y vendrán a recoger sus calificaciones, se que las calificaciones se entregan la próxima semana, pero como saben me gusta estar un paso adelante.-
La clase se baso en solo eso, al terminar de entregar las calificaciones Crowley decidió darles a sus alumnos un descanso, así que los dejo salir de su clase temprano.
—Pueden retirarse clase.- Cuando casi todos se habían retirado para su suerte Aziraphale aún seguia ahí- Aziraphale, quedaré un momento.-
Azira con nerviosismo miro a Gabriel.
—Estaré afuera para lo que necesites.- Gabriel le susurró a Aziraphale y se retiró para quedarse parado a lado de la puerta esperando a que su amigo saliera sano y salvo.
—¿Que necesita profesor?- Aziraphale se movía notablemente nervioso en frente del escritorio de Crowley, este no respondió y busco entre sus cosas para sacar una pluma completamente nueva.
—Aqui tienes, este es tu verdadero regalo de cumpleaños.- Al entregársela a Aziraphale este pudo verla más a detalle, la pluma era por completo negra, con detalles dorados, y al rededor de ella se dibujaba lo que parecía ser una serpiente, simplemente hermosa.
—E-Es hermosa, muchas gracias, n-no tenia que molestarse.- Su cuerpo se relajó y miraba la lapicera con admiración.
—Espero que disfrutes tu cumpleaños, no todos los días se cumplen 18 años.-
Aziraphale miro sonriente a Crowley, apretó la pluma y la acerco a su pecho, inclino la cabeza en un gesto de agradecimiento y se retiró.
¿Más lindo no podía ser ese hombre? No importaba que pasaría ese día, ese sin duda sería el mejor regalo.
—¿Que paso?, ¿Que te dijo?- Gabriel miro la gran sonrisa de Azira, dejandolo aún más confundido.
—Este será el mejor cumpleaños de toda mi vida.-
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Imaginense esa pluma pero con una serpiente el rededor, está bn vrgs JAKAJA
