24

83 5 6
                                    

*Harry*
Al salir del despacho de Snape una sensación de vacío inminente me albergó, es ese sudor frío de saberme descubierto, de pensar en lo que Malfoy me hará si se entera que lo delaté con Snape, o de pensar lo que él mismo le hará a Malfoy ahora que sabe lo que sucedió... Parcialmente. Aún no estoy listo para ir al dormitorio, no sabiendo que Hermione y Ron me esperan probablemente para iniciar otro interrogatorio, decidido me encaminé hacia la torre de astronomía, me hará bien reflexionar un poco.

*Snape*
Maldición, ya he tomado dos copas del mejor licor de mi bodega y mis pensamientos todavía no se aclaran, de tan solo imaginar a Potter con Lucius... De forma comprometedora, vuelvo a enfurecerme. Le pedí que se vaya porque incluso ver su cara me molesta ahora, hizo lo mismo con Lupin, su estúpida necesidad de agradar y conformar a los demás lo lleva a doblegarse aún en contra de su escasa voluntad, lo nuestro... Bueno, lo que sea que tengamos o podamos llegar a tener no funcionará si no aprende a poner límites. Pensando demasiado en cosas que quizás no debería, una ocurrencia surcó mi mente, una medida drástica que no es una buena opción, sino mi única opción. Con la idea fresca me dirigí a mi escritorio y desplegué allí un sinfín de materiales que consideré útiles en general junto con mi caldero y me puse manos a la obra. No estoy dispuesto a compartir a Potter, a pesar que siempre me fastidió demasiado su presencia, específicamente su personalidad referente a su progenitor pero, desde que le confesé la verdad sobre este desastroso juego a dos puntas y mis motivos, todo entre nosotros ha estado cambiando más rápido de lo que me gustaría, supongo que porque su forma de verme cambió; sí, eso debe ser aunque no tenía planeado nada de esto, se suponía que Harry Potter no debía saber jamás que vivo exponiendo mi cuello ante dos bandos por él, sé que al principio me odiaba y talvez habría sido mejor que continuara haciéndolo, de esa forma ninguno de los dos sufriría ni alteraría su modo de vivir (Pero no fue así) me precipité y arruiné todo, pero él y sus hormonas también tuvieron la culpa de la mitad de todo lo que sucedió, me orilló a hacerlo. El amor que le confesé fue real desde el inicio, Pero era amor paternal hasta entonces, en ningún momento había cruzado por mi mente transformarlo en otra cosa, tan inmoral, tan vulgar e indebido... No sé cómo he torcido tanto mis sentimientos e intenciones, lo único que sé ahora, es que no hay vuelta atrás, ya no puedo arrepentirme de nada. Debo estar loco.
Con toda la marejada de pensamientos y dudas que me azotaban, conseguí concretar algo, le di forma a una poción, una especialmente hecha para Potter, revolví mi caldero por última vez satisfecho con mi resultado, aunque estoy dudando de que sea práctico someter a un alumno de este modo, como profesor no debería, pero por otro lado sé que acabaré haciendo una excepción. Esperaré por la mañana... O, mejor ahora mismo, esto no puede esperar! Talvez esté durmiendo, sería muy pretencioso molestarlo en sus aposentos, como sea, tengo el mapa que le quité sigilosamente a Potter la otra vez, así que, vamos a ver si realmente duerme.

*Harry*
Al llegar a la torre, a medida que me acercaba a sus vistosos bordes pude divisar una figura esbelta mirando a la nada, a la noche.

-Admirando la luna profesor? «bromeé»
-Apuesto que te encantaría ver cómo me transformo «habla volteando hacia mi» lamento decepcionarte Harry, Pero esta noche no hay luna.
-Que mal, «me acerco con una sonrisa y me paro a su lado» emm, disculpe, no quiero sonar descortés Pero, qué hace aquí?... Digo, a éstas horas, si no está admirando la noche pues,
-Eso mismo debería preguntarte yo a ti. Un alumno no debería estar fuera de los dormitorios a altas horas de la noche, lo sabes Harry.
-Si, pero necesitaba pensar. Nada malo pasará si nadie lo sabe, cierto?
-Eso quiere decir que estás muy seguro de que no voy a delatarte «sisea a modo de pregunta mientras puedo verlo sonreír»
-Bueno, si... No lo haría verdad? «comienzo a dudar después de un rato, él suspira mientras vuelve a dirigir su mirada al cielo»
-No, no lo haré Harry, aunque debería. Cómo profesor es bastante irresponsable de mi parte. «habla con su típico tono monótono que siempre me transmite calma» Ven párate aquí a mi lado, charlemos un rato.

Las dos Caras de las SombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora