25

99 8 1
                                    

El joven que sobrevivió al peligro de la muerte una vez, se encontraba todavía al borde de la cornisa acompañado por cierto licántropo que lograba cautivarlo aunque ya no estuviera bajo los efectos de ningún maleficio. Podía pasar horas conversando con la adormilada y comprensiva voz de aquel hombre, pero Harry Potter sabía que debía sacárselo de la cabeza con urgencia ya que ahora su obligación estaba donde una larga y sedosa cabellera negra se encontraba, le debía fidelidad a Severus Snape y ciertamente eso le estaba costando (aunque no quisiera admitirlo) se había enamorado de todo el misterio que lo rodeaba, de su alma que era 'una' con la noche y de la voluntad desinteresada que le brindaba arriesgando su vida diario ante Voldemort solo para salvar la suya,,, lo hiciera por Lily o no, Harry no podía pasar por alto ese gran detalle. Sabía que había sido un completo error no haber sido claro con Lucius en aquella reunión, teniendo ya un dilema amoroso no podía permitirse un tercero, todo se había convertido en un gran enredo y ahora mismo le parecía imposible desenredarlo. Lupin lo comprendía, podía decirse que casi a la perfección, aceptando incluso el peculiar triángulo que se había transformado en un cuadrado; sin pretender nada a cambio, sin criticar, solo dejándose llevar por momentos junto al chico que guardaría en su memoria y talvez nunca se repetirían (o talvez sí) Remus no dejaba que esa situación lo inquiete ni cambiara para mal su relación con Harry, estaba seguro de conocer su límite y su posición en esto y eso era lo que lo mantenía en calma.

-Entonces, «respondió» sabes lo que me estás diciendo?... Lucius no acepta respuestas a medias, Harry, en especial cuando está seguro de que obtendrá lo que quiere «niega lento» cuando se impaciente vendrá por tí, aquí a hogwarts! «enalta» y no podrás esconderte, si yo fuera tú estaría pensando como resolverlo.
-No sé cómo hacerlo profesor, supongo que tengo algo de tiempo para pensarlo, antes de que vuelva.
-Poco, pero lo tienes. Lo primero aquí es resolver qué quieres tú de todo esto «dibuja un círculo imaginario con su dedo» por lo que me dijiste asumo que te sientes atraído hacia él.
-Eso n-no es... Así. «se sonroja» No me atrae s-solo,
-Por qué tienes tanto miedo de admitirlo?... Eh, a qué le temes?
-A nada! Es solo que realmente no sé cómo me siento en este momento. Pero creo que es algo normal luego de haberme relacionado de la misma manera perversa con tres hombres que conozco desde pequeño, e-eso fue casi un trauma! «expresa efusivo logrando que su acompañante se ría»
-Ya lo creo «concede risueño» tienes una imagen definida desde tu infancia de esas tres personas, abismalmente distintas entre sí, ninguna de ellas es tan cercana ni especialmente grata; y de repente todo eso cambia, comienzan a acosarte «sube una ceja» a decirte cosas extrañas, incluso llegan a besarte y a tocarte, algo que jamás habrías imaginado, deseado o creído posible... Es completamente normal que te sientas confundido, dividido y hasta un poco atemorizado diría yo, si estuviera en tu posición habría abandonado hogwarts desde el comienzo y no me acercaría más a ninguno de los tres. «el chico aprieta sus labios y sus puños también, evidenciando sus nervios mientras asiente con la cabeza» intenta no ser tan duro contigo mismo, no todo es tu culpa ya lo sabes.
-Gracias profesor, de verdad. Usted siempre sabe qué decir o de qué manera hacerlo. No sé qué haría sin usted.
-No, yo no sé qué haríamos sin tí, Harry...
-Si, bueno, «suspira con aires divertidos» todo gira en torno a mí así que...
-No. «lo corta en seco» eres importante para nosotros, 'sobre todo para mí' «agranda con calidez» porque te quiero Harry... Digo, «se retracta dándose cuenta de su error y carraspea incómodo retomando su pasiva tonada» t-te apreciamos, al menos Severus y yo, Malfoy... Es un caso aparte. No digo que realmente vaya a dañarte con todo esto, pero sin duda no debes fiarte de él.

En contra de todo pronóstico y de lo que Remus Lupin imaginó que obtendría como respuesta, el silencio del joven estuvo a punto de hacer que vuelva a retractarse de hablar pero antes de que pudiera hacerlo la contestación ajena llegó en forma de acción.
El chico de ojos esmeraldas se abalanzó sobre él concretando un sentido abrazo, siendo gratamente correspondido y abrigado entre los brazos ajenos; Lupin veía a Harry Potter como un chico necesitado de afecto y algo desprotegido, 'Afecto y protección' eran dos cosas que él se había propuesto darle aunque fuera distante, se lo debía a James y a Lily, Pero en momentos como este era donde Remus sentía que les fallaba. Sintiendo cosas extrañas hacia su pequeño hijo, sin poder evitar que su cuerpo se estremezca ante el contacto (cuál fuere) deseando más de él y divagando en solo un abrazo, Remus sabía que debía parar, pero últimamente siempre tenía problemas para hacerlo.
Los brazos del maestro afinaron la cintura ajena, se afianzaron a la esbelta figura con posesión, el joven pasó sus brazos por el cuello del culpable profesor, como preparándose para lo siguiente o queriendo pasar al siguiente nivel; tanto Harry como Remus se sentían culpables por no poder controlarse si pasaban mucho tiempo juntos, uno habiendo terminado su platónica relación y el otro engañando a quien más lo había amado hasta ahora. Parecía que estando juntos la culpabilidad y el mal sabor solo podían desaparecer de una forma... Reemplazándolos con sabores nuevos.
Fue así que dejándose llevar como muchas otras veces, Remus Lupin asaltó los labios de su alumno con hambre, los brazos de Harry entonces bajaron para aferrarse a la espalda de éste con necesidad. "Si solo Snape fuera así de demostrativo" pensó el chico. El frío de la noche quedó eclipsado por la calidez de ambos cuerpos restregandose en busca de algún consuelo inexistente, los suspiros y los jadeos que la niebla dibujaba chocaban entre sí, los besos emitían sonidos tan sucios que el clima estaba cambiando entre ambos, la chaqueta de Remus abierta como de costumbre, vislumbrando la blanca camisa que también estaba siendo desprendida por las jóvenes manos confiadas que pronto estarían recorriendo su abdomen.

Las dos Caras de las SombrasWhere stories live. Discover now