Un mes de puro amor

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16 de Marzo

Luna Pov

Mis gemidos se mezclaban con el aire mientras Pedri me empotraba contra el colchón con fuerza. Pedri se inclinó para besar mis pechos y acariciar mis pezones, antes de sujetar mis muñecas sobre mi cabeza y comenzar a embestirme con mucha más intensidad y fuerza.

—Joder, joder, joder—dijo ahogado.

Alcé las caderas, ansiosa por sentir más fricción. Sus ojos brillaron intensamente y me sujetó con fuerza mientras se adentraba aún más en mí.

Te quiero tanto—murmuró Pedri con voz ronca, sus ojos brillando con lujuria mientras me sujetaba con fuerza.

Sentí cómo las embestidas de Pedri adquirían un ritmo más pausado y constante, como si quisiera prolongar el momento. Pero teníamos prisa, de lo contrario llegaríamos tarde al club.

—más fuerte—imploré, sintiendo cómo se hundía aún más en mí.

Un cosquilleo de placer comenzó a recorrer mi cuerpo.

—Eres mia—susurró Pedri, apretándome con firmeza.

Toda tuya, amor—respondí con un susurro entrecortado mientras me acercaba para fundir nuestros labios en un beso apasionado. Sentí las últimas estocadas de Pedri mientras alcanzábamos juntos el clímax.

Pedri se deslizó fuera de mí, tirando el condón a un lado, y se quedó sobre mí, aplastándome mientras repartía dulces besos por todo mi cuello.

—Feliz cumplemes, amor—dijo, aún escondido en mi cuello.

—¿No sería mesiversario?— pregunté, riendo suavemente mientras acariciaba su cabello.

—Ah, sí! Tienes razón—respondió con una risa suave, levantando la cabeza para encontrarse con mis ojos—Pero para mí, cada día contigo es una celebración, sin importar cómo lo llamemos.

Sus palabras llenaron mi corazón de alegría. Me hacía tan feliz.

—Y para mí también, cada día a tu lado es un regalo—respondí, sonriendo mientras me perdía en su mirada.

Y era verdad. Este primer mes había sido idílico, un mes de puro amor. Poca gente sabía de nuestra relación, solo mis padres, algunos chicos del club como Ferran y Gavi y claramente Clara. Nadie más. Habíamos preferidos tener una relación privada. Cuanto menos gente lo sepa, menos gente se meterá. Además, no quería que su séquito de fans viniera a por mí, prefería no estar en el punto de mira y valoraba mi anonimato.

Sus padres y su hermano venían de visita mañana, y sería la primera vez que los vería en ¡14 años! Aún no sabían que Pedri y yo estábamos saliendo, iba a ser una sorpresa, aunque Pedri decía que su hermano ya se estaba oliendo algo. Que ganas tenia de ver a Fer y recordar viejos tiempos.

    (...)

Amor, recuerda que tenemos reserva hoy a las 21:00 —me recordó.

—Sí, pero antes tenemos que ir a un lugar —le dije con una sonrisa traviesa.

—¿A cuál? —preguntó él.

—Sorpresa, sorpresa —respondí con un guiño.

Él se acercó para darme un beso antes de desaparecer hacia el vestuario para cambiarse.

—¡LUNA ÁLVAREZ!—me llamó alguien detrás de mi.

Me gire y vi a mi padre.

La dulzura de la serendipia //Pedri González ⚽️Where stories live. Discover now