☆ONE SHOTS☆ HANNIGRAM

☆Lasaña☆

#Hannigram #corto #oneshot

El horno estaba en su máxima temperatura, el queso se fundía, la carne se iba cocinando y toda la mezcla de olores hacía que a Will se le hiciera agua la boca ni bien había entrado a la gran cocina.

—¿Qué estás haciendo? —preguntó Will acariciando su estómago; tanto él como su bebé estaban ansiosos de poder comer lo que papi les estaba preparando.

—Estoy preparando lasaña —exclamó con dulzura.

—Mmm... no suena como algo que tú harías.

—¿No? A veces las opciones más sencillas son las más deliciosas, cariño.

Will se acercó hacía su esposo y con cinismo le quitó una porción de queso parmesano.

—No toques los ingredientes —reclamó, dándole un golpecito inofensivo en la mano —Si te los comes, nos dejarás con hambre a todos.

—Hey, no me golpees. Tengo a tu hija dentro de mí y si me lastimas a mí, la lastimas a ella.

—¿Lastimarte? Ni que te estuviera clavando un cuchillo, exagerado —volteó los ojos, Will era dramático.

—Claro, yo siempre soy un exagerado —con un chillido lastimero, tomó otro queso y se lo metió a la boca rápidamente.

—Will, te dije que no... —En lugar de terminar de regañarlo, Hannibal besó a Will, estrellando cuidadosamente su cuerpo contra el mesón de la cocina.

—¿Puedes dejar de cocinar un momento?

—¿De verdad deseas que deje de hacerlo?

—Sí... —dijo con un susurro lujurioso.

Sus cuerpos se fueron acercando, el calor entre ambos aumentaba en el momento en el que sus miembros se rozaron a pesar de la prominente barriga de Will. Era un logro.

—Dime, mi mangosta, ¿qué tienes en mente? —Hannibal hizo la pregunta sabiendo la respuesta obvia de Will: tener relaciones hasta que el cuerpo de alguno de los dos colapsara.

Will sonrió lleno de deseo y amor hacia su par. Los besos incrementaron al igual que el incesante intento de tener sus cuerpos totalmente envueltos el uno con el otro. La cocina de Hannibal era un lugar repleto de sucesos; solo ellos y las paredes saben todo lo que ha acontecido ahí.

Sin embargo, antes de que la situación pudiera pasar a mayores, el horno emitió el sonido tan característico del temporizador avisando que la cocción había terminado, haciendo que el momento íntimo se rompiera.

Hannibal soltó un quejido de resignación y molestia, pero con picardía, se acercó a Will diciéndole:

—Parece que el destino quiere que estemos fuertes para poder continuar todo lo que reste de la tarde.

Will asintió con decepción, sus deseos de ser tomado por Hannibal a cualquier hora del día eran genuinos, pero su hambre era aún mayor, así que comería rápido para poder continuar lo que dejaron a la mitad.

☆☆☆☆★☆☆☆☆

—Will, es el quinto plato de lasaña.

—¿Y eso a ti en qué te afecta?

—Me afecta ya que estoy seguro en que probablemente me vas a terminar vomitando encima —resopló sirviendo otro plato de la deliciosa lasaña.

—Como el doble, por mí y por ella —afirmó señalando su estómago aún más hinchado por la cantidad de comida que se estaba induciendo —Y debo recordarte que es tu culpa.

—¿Yo qué he hecho?

—Tener tanto talento para cocinar y para otras cosas —aclamó picaramente.

—Es tan solo una lasaña. No tiene mucha ciencia.

—Aún me pregunto, ¿por qué lasaña? Casi siempre sueles preparar platos extraños, como la sopa de pollo que me hiciste cuando tuve gripe a los 3 meses de embarazo.

Hannibal miró a Will de arriba abajo, lo estaba juzgando.

—No era cualquier pollo de un corral vulgar... —Hannibal no iba a discutir sobre eso —Más bien, ¿te gustaría saber por qué preparé la lasaña?

—Siempre hay una razón detrás de tus acciones.

—Garfield.

—¿Garfield? ¿El gato naranja y gordo?

—¡Sí! Ese mismo. Solía leer las tiras cómicas de Garfield con Misha y hace poco estaba recordándolo.

—Pensé que habría una razón profunda detrás, quizás subí mucho mis expectativas.

—Es una excelente razón. Cuando la bebé nazca haré que le hagan una pijama de Garfield con tela de la mejor calidad.

—Es raro conocer ese lado tierno e infantil de ti, me gusta mucho.

—Quizás tú tengas una pijama de Snoppy.

—Me encantaría tener una pijama de Snoppy.