Promesas incumplidas [Libro 1]

Capítulo 27

Bella:

Me encontraba sentada en la sala desayunando con Darío y Karla.

—¡Qué vamos a hacer hoy? — preguntó la morena.

—Voy a llamar a el señor Lucas para que me ayude a reabrir el caso de mi madre. Pero eso será después que resuelva el caso que dice Alan.

—Oh buena idea. Alan no va a seder en reabrir el caso eso está visto —dijo Darío.

—Chicos saben ayer como vimos la película de la sirenita Ariel y nosotros somos tres. Eh pensado que porque no le ponemos un nombre a nuestro equipo —dijo Karla

—Esta genial eso Karla.

—Si ¿verdad?. Tengo pensado en que se llame el tridente.

—Que nombre más raro —dijo Darío.

—No es raro significa muchas cosas. Fuerza, union además el tridente tiene tres palitos y nosotros somos tres. Tachan esa mi gran idea.

—Me parece un buen nombre —dije dándole un sorbo a mi café.

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Me encontraba sentada en una silla de brazos cruzados frente a Alan.

El chico pelinegro de ayer también se encuentra aún no sabía su nombre.

—Bien Alan dime todo lo que sabes a cerca del caso.

—Bien anota. El nombre de la chica es Joana Susan tenía 39 años muerte un balazo Directo al corazón. Su cuerpo fue encontrado en el río.

—La verdad no se porque no me sorprende.

—A mi tampoco me sorprende ¿sabes? —dice Alan.

—¡Que piensas sobre esto Jake?

Abrí los ojos como platos cuando escuché esto. No podía ser él ¿o sí?. El chico solo me miró.

—Creo que nuestro autor puede ser un gran psicópata.

—Mira Bella no quiero pelear más contigo hagamos las pases vale.

— Vale —dije.

Alan y estrechamos manos y quedamos en un acuerdo. Al salir Jake me siguió me sentí súper incómoda con todo esto.

—Bella espera.

— ¡Qué quieres Jake! —bufé molesta.

—Yo solo quería decirte que lo siento.

—¿Lo sientes?, ¡Sentir qué! Que no disfrutaste lo suficientemente al engañarme y al usarme como un paño. Eso es lo que sientes.

—Bella eso no es así. Dejame explicarte.

—¡Y cómo es Jake, cómo es! Acepta la realidad de que me usaste. Te odio Jake, te odio desde el fondo de mi corazón podrido de tristeza y dolor te odio.

Darío paso a buscarme. Tenía lágrimas en los ojos odiaba sentirme así. Que cause lágrimas en mis ojos cuando lo veo. Odio este sentimiento que aún tengo por él. Al llegar a casa le conté a Darío y a Karla lo que pasó.