Capítulo 39

17 6 2
                                    

Bella:

Estaba acariciado mi pancita. Tenía que escapar de aquí, tenía que hacerlo por el bien de mi bebé. Tengo tanto miedo de que le pase algo, no me lo perdonaría nunca. ¿Que clase de madre soy? no pude hacer nada para evitar que Zack me violara y ahora no tengo el teléfono para llamar a Darío. Pero sé que el me va a encontrar tal vez Jake pueda rastrear la llamada sé que ellos me encontrarán estoy segura. En ese momento la puerta se abrió y entró ¿Nathan?

—No me sorprende que estes detrás de esto tu también.

—Me alegra de que lo sepas.

—¿Qué es lo que quierea de mí?

—¿Aún no lo sabes?

—¿Que cosa?

—Me encantaba tu madre.

—Eso no es un secreto. Pero vaya forma de amar la tuya ¿eh? ¿matarla era tu forma de amar?

Vi que Nathan suspiró —. No la quize matar porqué si. Ella me mintió.

—¿En que sentido?

—Ella me dijo que no estaba lista para empezar una relación pero al día siguiente la vi besándose con otro hombre.

—¡Por eso la mataste! —grité molesta —Si que eres un psicópata.

—Estaba enfadado y en un ataque de ira la maté.

—No me lo puedo creer. Nathan mi madre estaba enamorada de tí pero tu estabas casado y ella no iba a arruinar ningún matrimonio ni romper a una familia por eso también te rechazó.

—Yo nunca he amado a mi esposa la hubiera dejado para estar con tu madre pero me rechazó.

—¿Y hubieras dejado a tus hijas solas?

—No las hubiera dejado.

—No me estas diciendo porqué me tienes aquí —Nathan se acercó a mi a pasos lentos y me tomó del mentón.

—Bella me recuerdas a tu madre por eso te tengo aquí. Eres idéntica a ella tienes sus mismas curvas, sus mismos ojos, sus mismas mañas y sus mismos labios —dijo acariciando estos. Yo aparté mi cara, me daba asco que alguien como él me tocará.

—Estas enfermo Nathan.

—Zack me contó que estuviste hablando ayer por teléfono con tu amiguito Darío ¿eso es cierto?

—No.

—Más vale que no me mientas porque creo que sabes de lo que soy capaz de hacerte.

—¿Vas a matarme?

—Podría pero dejaría de ver tu rostro.

—¿A donde llevaste el cuerpo de mi madre?

—Tomé su coche me dirigí al lago y la tiré ahí —lágrimas caían por mi cara no debí haberle preguntado eso tiró a mi madre como si fuera basura a un lago. Nathan se agachó y limpió mis lágrimas.

Promesas incumplidas [Libro 1]Where stories live. Discover now