♔ Capítulo XIII ♔

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El impacto de la bala contra el pecho de Dashiell provoca que suelte un grito ahogado. A pesar del impacto que acaba de recibir continúa refugiado a Aleska contra su pecho cubriendo su ojos de una manera tan feroz que estoy segura que no le importaría perder la vida por ella.

Ally aparece a mi lado entregándome un arma para continuar disparando a los hombres de Marcello qué se van contra los invitados buscando asesinar a quienes se les atraviesan. 

Me rompo en mil pedazos cuando veo el cuerpo de Rachel en el suelo a causa de disparos por parte de mi enemigo. Se me nubla la vista y el dolor de su pérdida es obvio pero no puedo perder tiempo en este momento y permitir que se lleve a mi hija por mi falta de concentración. 

Mi cuerpo reacciona cuando veo nuevamente en peligro a mi hija y al hombre que la resguarda como un león. El pánico de perderlos hace que suelte el seguro y apunte al maldito que se prepara para soltar la segunda bala en la cabeza de Sinclair.

La adrenalina se apodera de mí y siento como mi sangre hierve por lo que más me consume,  mi necesidad por protegerlos. Presiono el gatillo soltando una bala qué me roza la mejilla izquierda, su mirada furiosa va hacia mi y cambia la dirección de su arma, estamos frente a frente y vuelvo a soltar el gatillo en su dirección esta vez dándole un poco más abajo de la clavícula.

—¡Maldita loba! —grita. 

Uno de sus hombres intenta disparar en mi contra pero Liam termina con él soltando una bala limpia en la cabeza. 

—Retirada. —grita un hombre de ojos azules que con gran habilidad se acerca a Lombardi y se lo lleva en medio de la lluvia de balas.

En medio del mar de personas heridas corro hacia Dashiell y mi hija. En cuanto el hombre me ve suelta el arma ya sin balas y me entrega a la pequeña que se encuentra dormida.

—Le di un pequeño sedante, no le causará daño. —susurra con las pocas fuerzas que le quedan. 

Asiento.

Llevó a la niña contra mi pecho sin soltar su mano. Sus ojos dorados muestran el dolor qué siente por las heridas pero extrañamente sonríe de lado. 

—No mentí cuando dije que daría mi vida por ambas. 

—Lo sé. —me limito a decir mientras acaricio su mejilla. —Vas a estar bien. 

—Te quiero, y es real. 

Poco a poco cae con la espalda contra el suelo sujetando la herida que tiene cerca al corazón. Mis ojos se abren presa de pánico y grito buscando ayuda 

Mi papá no duda en tomar a Aleska en brazos y alejarse a un lugar seguro con sus escoltas cubriendo los, mientras mi madre cae de rodillas a mi lado intentando contener la hemorragia.

—¡Maldición! —grita furiosa con los ojos cubiertos de lágrimas. —No te dejaré ir, a ti no. 

—Katrina necesito hacer un corte más amplio sacar la bala que está impidiendo respirar y luego suturar. —explica. 

Asiento. 

Corro tomando una botella de licor desinfectando la navaja que guardo en mi muslo entregando a mi mamá quien no duda en hacer más grande la herida y luego de lavar sus manos con ayuda de la fina cuchilla busca la bala.

Su equipo de la FES nos rodea a una distancia prudente, puedo ver a las chicas heridas en los brazos mientras que Liam es el único que está perfecto. 

Tomo el equipo que Damon nos trae y busco los hilos de sutura y comienzo a cerrar la herida con concentración. Emiliano ya perdió el conocimiento pero si mi madre no interviene aquí no llegaría vivo al hospital.

ZAKHAROVAWhere stories live. Discover now