Mi estúpido EX novio (TERMINADA)

Epílogo.

----Cinco años después...-----

MELL

Estaba en mi cuarto año en la carrera de medicina, tuve que dejar uno para cuidar a mi bebé, pero eso no me molestaba en absoluto. Ian había terminado su carrera hace un año y ahora trabajaba en el hospital más importante de la ciudad.

-Permiso, profesor, tengo que hablar con Melody Reed, es urgente - interrumpieron en el salón de clases.

-Claro. Mell, te necesitan.

Asentí y me puse de pie. -¿Qué pasó, Ruth? - pregunté a la recepcionista de la universidad, se había hecho una gran amiga mía, por eso la confianza.

-Mell, llamaron de la escuela.

-Ay, no.

-Mejor ve por tus llaves.

-No, iré corriendo. Tardaré demasiado en salir del estacionamiento, y el tráfico es horrible.

-¡Mell! - la ignoré.

Ni siquiera volví al salón para avisar que saldría, ni siquiera tomé mis cosas, sólo corrí por las calles a toda velocidad. La escuela quedaba a sólo cinco calles de mi universidad y a siete del trabajo de Ian.

Era la cuarta vez que me llamaban de la escuela en menos de un mes. Gracias a Dios era una buena alumna y los profesores entendían mi situación cuando salía corriendo de las clases. Llegué a la escuela y me dijeron que habían llevado a mi hija al hospital cercano.

No sabía si ponerme histérica, matar a alguien por no cuidar a mi bebé, o alegrarme de que sea el hospital de su papá. Corrí de nuevo siete calles y llegué completamente exhausta al hospital. Pregunté por mi hija en la recepción, pero la vi saliendo de la mano de su papá, con un yeso en el brazo. Casi caigo al suelo desmayada del susto.

Mi hija tenía la cara descompuesta en una mueca de enojo, mientras que Ian sonreía. -¿Qué fue lo que pasó? - respiraba con dificultad.

-Se cayó del tobogán y se fracturó el brazo.

-Ay, Dios, Summer..., te he dicho mil veces que no seas tan bruta.

-Mami, ¿con quién tengo que hablar para cambiar mi ángel de la guarda?

Ian rió fuertemente y la tomó en brazos, después de todo, él tenía razón, fue una niña..., una princesa, como él decía. Salimos hasta el estacionamiento.

-Sube a Summer al auto, yo aún no puedo salir...

-Eh..., esto..., no traje auto.

Frunció el ceño. - ¿Y cómo llegaste hasta aquí?

-Em..., vine en taxi.

-Melody Reed.

-Está bien, me vine corriendo desde la universidad, mátame.

-Mell, si fueran otras las circunstancias, no me molestaría, pero...

-Ya sé, ya sé. Es el mismo discurso de siempre: "tengo una carrera y debo terminarla y lalala...", pero también tengo una hija.

-Tenemos...- dijo, marcando un número de teléfono -. Alice, ¿puedes venir al hospital?, es urgente - procedió a explicarle todo lo que pasó. Alice estaba en la misma universidad que yo, siguiendo odontología. Llegó en su auto en menos de dos minutos, no sé cómo, ya que el tráfico a esta hora era terrible.

Summer sólo nos miraba sonriente. - ¿Por qué la tía Alice está gorda? - preguntó de pronto. Ian se largó a reír mientras que yo intentaba no hacerlo.