Yo soy Iron Man (MHA)

Capítulo 4: ¡Fuego!

[Punto de vista de tercera persona]

"¡FUEGO! ¡FUEGO! ¡JARVIS, AYUDA!" gritó Tony mientras corría por su laboratorio. Jarvis apareció con un extintor y rápidamente apagó las llamas en la estación de trabajo de Tony.

Tony tosió y le dio una palmadita en la espalda a Jarvis. "Jarvis, ¿qué haría sin ti?"

"Te suicidaste", dijo Jarvis con una mirada cansada.

"Lo más probable", asintió Tony en señal de acuerdo.

"Viernes, ¿cuántos fracasos fueron esos?" preguntó Jarvis.

"151", respondió la voz femenina robótica.

"Joven Maestro, ¿cómo es que ya no estás desanimado? Cualquier niño de siete años que conozco habría hecho un berrinche y se habría dado por vencido a estas alturas"

Tony miró a Jarvis de forma extraña y retrocedió un poco. "¿Conoces a otros niños de siete años aparte de mí? ¿Por qué te reúnes con ellos?"

Jarvis mantuvo una cara seria y se volvió hacia la puerta. "Me voy"

—No, no, no, Jarvis, sólo estoy bromeando. Vamos, amigo, sabes que sólo estaba bromeando. Además, sabes que no puedo estar aquí sin ti.

—Y la razón por la que no me doy por vencido es simple. El camino al éxito se construye sobre los ladrillos del fracaso, como siempre digo. Cada error que cometo me acerca cada vez más. Además, el siguiente es el final, el siguiente es cuando lo complete, simplemente lo sé. Ya tengo todo listo.

Jarvis asintió. —Es un dicho muy bonito, joven maestro.

—Gracias, Jarvis —sonrió Tony.

La puerta de su laboratorio se abrió y apareció Howard. —Prepárate, Tony. Vamos a una fiesta.

—¿Fiesta? ¿Qué fiesta? Tony inclinó la cabeza confundido.

—Una fiesta organizada para David Shield. Ha ganado un premio Nobel y, como somos colaboradores, tenemos que estar allí para mostrar nuestro apoyo.

—Ah, está bien —Tony le hizo un gesto con el pulgar hacia arriba. —Me prepararé entonces, viejo.

Howard asintió y salió del laboratorio mientras Jarvis miraba a Tony de forma extraña.

—¿Qué? —preguntó Tony.

—Habría esperado que hicieras un berrinche o algo así.

Tony puso los ojos en blanco. —Papá ya me ha dado tanto. Sería un error de mi parte empezar a quejarme cuando me pide algo a cambio, aunque sea poco.