Capítulo 26

299 20 0
                                    

Lucero quedó sorprendida al ver a Marcelo allí, porque estaría a esas horas buscándola en su habitación?; queriendo dar respuesta a su inquietud se animó a preguntarle:

LUCERO: Marcelo que haces aquí?, necesitas algo?

MARCELO: Hola Lucero, que pena venir a esta hora, lo que pasa es que tengo problemas para quedarme dormido, y se me ocurrió ir a dar un paseo...y bueno mientras pasaba por aquí se me pasó por la mente invitarte a que me acompañes....... Te gustaría ir a dar un paseo por la playa? (le preguntó nervioso mientras le entregaba la rosa que tenía en sus manos).

Lucero no entendía porque Marcelo quería que ella lo acompañara, porque no podía pedirle eso a cualquiera de sus compañeros?. Pero algo que le preocupó seriamente fue que de seguro Fernando estaba escuchando lo que Marcelo le decía, y tal vez no se lo tomara nada bien.

Y estaba en lo cierto, Fernando estaba escuchando todo, y para nada le gustó el hecho de que un tipo estuviera invitando a su novia a dar un paseo. Además con tan solo escucharlo, aquel hombre le daba muy mala espina.

LUCERO: Eh..., lo siento Marcelo pero es que estoy muy cansada y ahora solo quiero dormir. (le contestó amablemente)

Sin embargo, a pesar de la respuesta negativa de Lucero, Marcelo no se quiso dar por vencido, así que intentó convencerla.

MARCELO: Vamos Lucero, concédeme el honor de tu compañía, mira que no nos vamos a demorar, simplemente salimos y hacemos un pequeño recorrido, te prometo que en cuestión de minutos estaremos de nuevo en el hotel.

Lucero empezaba a sentir cierta incomodidad.

LUCERO: De verdad gracias por invitarme Marcelo, pero ahorita no tengo ganas de salir, créeme estoy súper cansada y lo único que quiero es recostarme en mi cama y dormir mucho.... Pero porque no invitas a uno de los demás participantes, tal vez alguna de las chicas te quiera acompañar.

Marcelo sintió cierta frustración y enojo, pero aún así fingió amabilidad con Lucero.

MARCELO: Bueno lo que pasa es que la mayoría ya se encuentra durmiendo, y en verdad pensé en ti porque algo me decía que todavía estabas despierta y te podía invitar, pero bueno si no quieres no hay problema.

LUCERO: que pena contigo Marcelo, yo en verdad no quiero parecer descortés, pero es que....

MARCELO: No, no te preocupes linda, yo entiendo que debes estar muy cansada y que ansias dormir. Discúlpame a mi por venir a interrumpir tu descanso.

LUCERO: No, no tranquilo, al contrario gracias por venir a invitarme.

Marcelo solo esbozó una sonrisa, por dentro estaba que estallaba de la rabia, él esperaba que ella accediera a acompañarlo, así tal vez podía suceder algo entre los dos, pero lamentablemente las cosas no habían salido a su favor.

Del desprecio al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora