Capítulo diecinueve

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—¡Joe! —exclamé acercándome a él y abrazándole, él me correspondió riendo— Madre mía, ¿qué haces aquí? ¿No estabas rodando en Grecia? —pregunté una vez nos hubimos apartado.

—Sí, pero ya hemos acabado el rodaje allí. Volví hace un par de días —Me explicó—. Hola Marie —Saludó a la castaña con la que estaba hablando hasta hacía un momento.

—Hola —Se acercó—. Bueno, yo os dejo solos que seguro que tenéis mucho que hablar. Nos vemos Abbie —Se despidió.

—Adiós, espero que a partir de ahora hablemos más.

—Claro —Me guiñó un ojo y se alejó entre la multitud de gente que había en la fiesta.

—Que raro no ver a la diablillo que va siempre contigo —Sonrió de lado.

—No te metas con Serena —Le reprendí aunque sabía que bromeaba.

¿Es posible que dos ex's se lleven así de bien?

La respuesta es sí, al menos en nuestro caso. Cuando la gente nos preguntaba sobre ello siempre lo achacábamos a que, en la última etapa de la relación, habíamos estado tan distanciados que lo que sentíamos el uno por el otro había ido cada vez a menos hasta solo querernos como amigos. Evidentemente al principio de la ruptura la cosa no había sido fácil y nuestra relación no era como la que teníamos ahora, pero ya hacía un año y medio o así desde eso y supimos superarlo.

—Sabes que es broma, adoro a la morena —Rió—. ¿Te apetece tomar algo? —preguntó señalando la barra a nuestras espaldas.

—Claro —Accedí y él posó su mano sobre mi espalda, guiándome.

Una vez allí él pidió un cerveza y yo una Coca-Cola —tampoco es que me fuesen a servir alcohol, en este tipo de fiestas si que controlaban bastante eso—.

—Entonces, ¿ya habéis acabado de rodar en Grecia?

—Sí, de aquí a unos días tendré que viajar a Los Ángeles para grabar algunas escenas que faltan.

—Y, ¿qué tal por Grecia? Debe ser todo precioso.

—Lo es —Admitió—. Nosotros nos hemos estado quedando en la isla de Paros, un lugar precioso, pero para algunas escenas hemos ido a otras islas y es simplemente increíble.

—¿Has hecho fotos? —Asintió— Ya me las estás enseñando —exigí seria y él rió mientras sacaba el móvil del bolsillo de su americana.

Joe era un chico con un gusto exquisito para la moda y si a eso le añadimos lo atractivo que era... Tenía el paquete completo.

Era alto, probablemente llegaría al metro noventa, y tenía un cuerpo atlético pero no en exceso. Su pelo era castaño y acostumbraba a llevarlo algo despeinado, pero le quedaba de tal forma que parecía que se lo hubiese peinado así a propósito. Sin embargo si me tuviese que quedar con algo probablemente sería con sus ojos, eran azules con ciertos toques verdosos. En resumen, y como diría Serena, el chico estaba de "toma pan y moja".

Probablemente os estéis preguntando como dejé ir a tal monumento. Sí, yo también me lo pregunto a veces.

Tras entrar a la galería de su móvil empezó a mostrarme las fotos. Calles empinadas bordeadas por casas blancas, tejados azules, playas de aguas cristalinas...

—Definitivamente debería haber sido actriz para poder ir a rodar a sitios así.

—Sí, una pena que no sepas actuar —Dio un trago a su cerveza.

Tied • jb [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora