Capítulo 16.

532 38 22
                                    

C A L U M.

Sonrío al ver a Luke acercarse. Justo en eso la música que antes estaba comienza a sonar nuevamente.

—¿Bailas? —Estira su mano hacia mí, la que tomo con gusto.

Me lleva hacia el patio trasero de la casa, donde provenía la música. Bailamos un rato hasta que colocan una canción lenta. No sé si seguir bailando con el chico o ir adentro y sentarme en algún sofá.

—¿Y? —pregunta tímido, antes de que pueda decidir.

—¿Qué?

—¿Te gustó la canción?

—Me encantó —admito, bajando la mirada.

El rubio toma mi mano delicamente. Las observo juntas y entrelazo mis dedos con los suyos. Levanto la vista con lentitud.

El de iris azulada se acerca un poco más y siento su respiración en mi cara. Yo simplemente observo sus movimientos.

—Si te beso ahora, ¿me apartarías? —susurra en mi oído, haciendo que un escalofrío pase por mi espalda.

¿Lo haría?

—No es correcto, pero... ya no quiero ocultar más esto. —Echo mi cabeza hacia atrás para poder mirarlo.

—¿Y qué es "esto"? —Lo veo sonreír.

—"Esto" es amor. El que siento realmente por ti..., que no es de amigos —confieso.

Su sonrisa se amplía y me toma por la cintura, acercándome más a él. Yo, por mi parte, poso mis manos en su nuca.

Y me besa. Nuestros labios se mueven a un mismo compás. Luke se comienza a balancear en medio del beso. Y comenzamos a bailar, rompiendo éste. Apoyo mi cabeza en el hombro del rubio.

Cuando vuelven a poner la música movida, nos separamos. Lo miro a los ojos y, por un momento, todos a nuestro alrededor desaparecen..., sólo existimos nosotros. Pero esa sensación sólo dura unos segundos, ya que alguien llama a Luke.

—Hey —responde Hemmings, mirando a Ashton, haciendo que me sostenga de la cintura con una sola mano.

—¿Cómo la estás pasando ahora, eh? —pregunta como si yo no estuviera aquí.

—Pues, muy bien. —Luke me mira de reojo con una pequeña sonrisa en los labios.

—Bien... —Y agrega inmediatamente después con una sonrisa de lado:— Lo lograste, hermano.

Se va y miro su espalda alejarse. ¿A qué se refería con eso?
El rubio debió notar mi cara de pregunta, ya que dice:

—No te preocupes, no es nada malo.

Asiento. Después de eso, bailamos, hablamos y comemos..., en teoría, nos divertimos. Ahora el problema sería cuando llegue a casa. ¿Qué haré?

• • •

—¿Ahora qué pasará? —me pregunta el ojiazul, al llegar a la casa.

Me encojo de hombros.

—¿Seguirás con Michael? —coloca las manos en los bolsillos de sus pantalones.

Hago una mueca.

—No. No creo que sea buena idea seguir así.

—Entonces, en un futuro próximo, ¿podrá haber un "nosotros"?

Me vuelvo a encoger de hombros con una sonrisa apareciendo en mis labios.

—¿Sí o no? —Se cruza de brazos y hace un puchero.

everything i didn't say ❥ cakeWhere stories live. Discover now