II

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El viaje había estado haciéndose bastante largo, ya me aburría de molestar al chico, porque nadie le quitaba esa cara de irritación con la que había llegado, ahora era de furia.

Mi hermana se había mantenido en silencio desde el incidente, no había dado la cara a excepción de unos segundos atrás que se paró para ir al baño.

-¿Necesitas algo? -Pregunté al ver a ese castaño inclinado sobre el sillón viendo el móvil encendido de mi hermana que estaba sobre el libro, seguramente lo leía mientras huía de su vergüenza- ¿Puedo ayudarte?

-Emm.. -Aclaró su garganta, se irguió sobre su silla.

-Es guapa ¿verdad? -Susurré acercándome a su silla sin pararme de la mía- No se lo digas, porque créeme, lo tiene muy claro.

-Mamá, ¿puedo contar historias vergonzosas de Carol?

-No -Respondió riendo

-¿Por qué solo mamá? ¿Acaso yo me quedé en casa?

-Lo siento papá -Reí

-Esos serán tus suegros-Susurré de nuevo para el chico- Son un poco gruñones, pero no creo que te superen.

Papa rio, tal parece había escuchado.

-¿Q-que? -Preguntó incomodo

-No es como que nos llevaremos bien, pero como cuñado puedes aprender -Me miró horrorizado-Tienes cara de llamarte...

-Ethan, me llamo Ethan

-Oh eso de llamarse Ethan debe sentirse bien

-Si se siente tan diferente a llamarse Carlos -Respondió envuelto en sarcasmo, sonreí e la misma forma.

-¿Puedo pasar? -Se excusó mi hermana para pasar a su lugar, no se atrevió a mirarnos y de inmediato se metió en su cobija.

Me giré hacia mis padres que parecían disfrutar de su compañía como siempre.

-¿Estamos cerca? -Papá miró su reloj y luego sonrió

-Algo menos de una hora

-Bien

No sé cuánto tiempo transcurrió o fue necesario, solo me quedé observando el asiento delantero y pensando lo que sería este verano, cuales eran realmente mis objetivos. No quería este viaje, no ahora, no así, realmente tenía planes más ambiciosos y este viaje los arruinaba.

Sí era el primer viaje internacional que yo hacía, debería ser emocionante y creo que lo era, pero prefiero manejar mi actitud de jodida rebelde caprichosa.

En cuestión de minutos para mi posición distraída había una chica anunciando que teníamos permitido remover los cinturones y desalojar de forma ordena el pasillo.

-Toma tu maleta -Cogí esta y arrastré un poco- Sé que te arrepentirás -Mamá insistía que mi maleta era muy pequeña

-No es como que espere quedarme mucho tiempo aquí

Ignorando mi comentario se dirigió a la cinta para esperar la suya, arrastré la mía hasta unos sillones y me acomodé esperándolos.

Estaba emocionada por estar fuera de mi país, estaba emocionada por tener playa, por tener un poco de sol y un ambiente diferente, lo estaba. Algunas promociones turísticas mostraban a Miami como un lugar especial, eso quería creer yo.

¿Qué seguiría?, Conocer personas no era mi fuerte, lo que sucedía en el avión eran casos especiales cuando me sentía en mi territorio y quería divertirme salía esa parte extrovertida de mí. Pero al tiempo podía ser muy introvertida, era algo extraño, lo que siempre me ayudaba a estar sola.

S.M |TERMINADA|Where stories live. Discover now