S.M |TERMINADA|

XLVIII

Bueno entender las cosas no era mi mayor talento, pero hacer estupideces sí que lo era y tenía miedo porque llevaba cuatro semanas en Canadá y no había hecho cosas que usualmente hago para avergonzarme y guardarme en el cuarto toda una semana.

— Te amo —Veía como Luke le murmuraba a Lenna sobre su mejilla. Parecía una larva pegada a la pobre mujer— Mucho

Ella murmuró algo que no alcancé a escuchar y comenzarón a  reir y murmurar cosas entre ellos. Se veían realmente muy, demasiado enamorados.

Pinché un pedazo de pollo y lo llevé a mi boca mirando el restaurante en el que estábamos. El que parece ser el gerente paso frente a mi y me saludó con un asentimiento y una gran sonrisa, como era mi costumbre moví mi mano en forma de saludo y me avergoncé, aquí todo era demasiado cortés.

En casa solo preparábamos el desayuno y casi siempre veníamos a este lugar para almorzar, la cena Luke o Lenna la llevaban o algunas veces salíamos a otros lugares. Aquí teníamos una mesa especial al parecer, puesto que siempre nos hacíamos en el mismo lugar.

Una señora que veía la mayor parte del tiempo sentada a dos mesas nuestras me saludó con otro asentimiento y esta vez le regresé el saludo de forma cortés. Prefería estar saludando personas que sintiéndome incomoda entre Lenna y Luke.

— ¿Cuando piensan casarse? —Las risillas entre ambos cesaron y sus caras se tornaron serias y parecía que había hecho mi bomba incomoda y acumulada por cuatro semanas

— Voy al baño —Dijo Luke luego de cinco minutos en un tenso y cortante silencio.

Lenna no se giró a verle como siempre lo hacía, ahora solo parecía muy interesada en su comida.

— Él no quiere casarse —La comida que llevaba cinco minutos en mi boca parecio por fin liberarse por mi garganta de forma sorpresiva

 —Yo no lo sabía, no... Lo siento, es que ustedes lucen como, no sé tan jodidamente enamorados y él parece querer poner todo a tus pies y...

— Pero no su libertad —Se encogió de hombros tratando de restarle importancia, pero sabíamos que era lo que ella había soñado por año. Ella amaba las bodas, las historias de amor y ahora tenía la suya, pero sin la boda— Estuvimos un tiempo separados, queríamos cosas distintas. Pero es mejor tener esto a nada 

 —Tu no te conformabas

— Mare, te enamoras y caes. Las cosas no van como creías que serían siempre y muchas cosas se adaptan a lo que sientes 

Nos quedamos en silencio cada una mirando su plato

—Ha tardado ¿Será que huyó?  —Intenté bromear , pero había sonado mejor en mi cabeza— Ya lo siento

— Sabes lo hizo una vez, prefiero disfrutar los pequeños momentos porque, No sé cuando volverá a huir 

— No lo voy a hacer, no de nuevo —Cuando escuché la profunda voz de Luke irrumpir nuestra conversación decidí pensar que esto se tornaba como algo incomodo pero muy muy interesante.

Decidí  recostarme en la silla tomar mi jugo y dejar de masticar

 >>Creí que estabas segura de esto

— Vamos a terminar de almorzar, por favor —Pidió ella sin mirarle  

 Luke me miró algo serio y me sentí realmente mal por haber causado esto.

— Desde que llegaste aquí hemos discutido más de lo que habíamos hecho en el ultimo año

Y si antes me había sentido mal, ahora quería que la tierra me tragara y me escupiera lejos de aquí. Justo ahora parecía no ser la persona favorita de Luke y ese era el desagradable Luke. Solo salía cuando alguien provocaba estas diferencias con Lenna y por eso sabía que él estaba completamente enamorado de ella.

Evadí su mirada y el gemido de sorpresa en Lenna, me incliné acomodándome de nuevo en el asentí y mirando mi comida, centrada en terminar rápido de comer.

— No acabas de decir eso —Escuché decir a Lenna, pero solo quería desconectarme de su conversación. Así que solo tome por debajo de la mesa la pierna de Lenna para que se detuviera.

Cuando Lenna fue a decir algo más solo presioné más mi manó y le señalé su plato. No quería joderlo aún más

La mesa se quedó en silencio y a todos parecíamos haber perdido el apetito.

— Señor Luke digame que tal le pareció todo —Pidió el gerente con demasiada energia para la situación

—Fantástico como siempre, muchas gracias, pero creo he quedado bien ahora 

—  Bueno queríamos invitarles mañana tendremos un show en vivo y esperemos tenerle mañana en el almuerzo

— Claro que si como siempre, estaremos aquí, Carlo

—Si quiere traer a alguien podemos ampliar la mesa o ponerle más cerca de la tarima. Usted nos dirá

— Solo nosotros tres —Tres lineas que representaban confusión se formaron en mi frente podía sentir cada una de ellas. Yo no pensaba venir aquí, no definitivamente no— Creo que nos quedamos con esta mesa Carlo, muchas gracias

—Señoritas, que tal todo

Yo no iba a hablar, ni una sala palabra más saldría de mi boca. Alguien debió de hacer algún gesto, porque no escuché más la voz del señor

No miraba a alguno de ellos solo miraba mi plato y eso parecía interesante ahora

— Ahora acosas platos en lugar de cantantes —Bromeó Luke, parecía estar más relajado, parecía querer relajar las cosas. Pero no  había forma al menos de mi parte no.

Me quede en silencio dando vueltas al arroz que quedaba allí e intentando tragar este mal momento, tenía unas tremendas ganas de llorar, no quería que ellos pelearan por mi.

— ¿No quieres más? —Preguntó Lenna al ver como había ignorado a Luke.

Suspiré dispuesta a no joderlo de nuevo, saqué de mi abrigo dinero que había mandado papá al menos para pagar mi plato y lo dejé sobre la mesa me paré de allí y caminé fuera del lugar donde ellos habían estacionado, para esperarlos allí.

Una señora caminaba con una niña de la mano y entraban justo al restaurante y tenía la leve sensación de haberle visto, de ya conocerle, ero este pensamiento fue deshecho cuando Luke salio detrás de una silenciosa Lenna.

Él solo tenía una mano en la parte baja de la espalda de Lenna y en la otra sostenía las llaves del auto.

—¿Estás bien? —Preguntó Lenna. Luke parecía atento a mi respuesta, pero omitía sus miradas, me encogí de hombros y me giré para sostener la puerta indicando que esperaba que desactivaran la alarma 

Luke desactivó la alarma y yo entré en el auto. 

Cuando ambos entraron en el auto sentí sus miradas por el retrovisor. 

— Lo siento, por lo que te dije hace un rato—Asentí y sonreí como si no importara— ¿No vas a decir algo?

Negué 

Lenna miró a Luke y luego solo miró por la ventana, noté como Luke buscaba su mano y ella solo intentaba alejarse más

 Por el mismo retrovisor vi los ojos de Luke opacarse de forma instantánea y esto solo me ponía peor

Cuando llegamos a casa todos nos quedamos en el auto,decidí bajarme darles un tiempo para que hablasen, pero antes me acerqué a la puerta en la que estaba Lenna y le susurré 

— Él no lo está pasando bien, no discutan por mi

Y caminé hacia la casa.